Ciclismo | Tour de Francia 2007
"Los éxitos de mi hijo son sólo fruto de su trabajo"
Los padres de Contador nos cuentan cómo es el campeón
En 1997 Francisco Javier, el hermano mayor de Alberto Contador, aprobó la selectividad y sus padres le compraron una bicicleta para sustituir la vieja Orbea del tío Raúl. Alberto, que tenía 14 años, se quedó la Orbea y se empeñó en salir con la pandilla de su hermano, pese a la oposición de éste. A los pocos días Emilio, un componente del grupo cicloturista, se fue a ver a Paco Contador, el cabeza de familia. "Tienes que meter a Alberto en un equipo. No es normal lo de este chico, nos deja atrás en las cuestas con ese mamotreto", le dijo Emilio.
Buen ojo, Emilio. Diez años después Alberto Contador es el hombre espectáculo del Tour tras seguir una trayectoria vertiginosa: Uni de Pinto, Velo Club Portillo, Würth "Tú no Alberto, tú no sales en la foto. Te vienes con el primer equipo, con la ONCE", le dijo Manolo Saiz el día de la presentación. Con 20 años Contador ya era profesional.
Veterinario.
"Saiz quería amarrarlo, para que no se lo quitaran", recuerda Paco. "Está mal que yo lo diga, pero mi hijo era un crack en todos los deportes. Destacó en el fútbol y en el cross, pero cuando cogió la bici ya no quería otra cosa". La bici y los animales, esa es la otra gran afición de Alberto, que quería ser veterinario. "Lo que más le gusta son los pájaros. Tiene jilgueros, pardillos, verderones y verdecillos. Tenía canarios, pero los dejó porque decía que era demasiado fácil criarlos". Es de suponer que a partir de ahora tampoco le gustarán los pollos.
La afición a los animales y al campo le viene de sus veranos en Barcarrota (Badajoz), el pueblo de sus padres, que emigraron a Pinto hace ya más de treinta años.
La bandera de Madrid, la roja con siete estrellas, que hemos visto estos días la llevan Jorge, Pato, Paquito... amigos de Alberto. En Francia también está Macarena, su novia de siempre, y sus hermanos Francisco Javier (27 años) y Alicia (26). Su madre, Paqui Velasco, llegará el sábado. "Saqué el billete hace un mes porque tenía un presentimiento". Su padre no, se queda a cuidar al hermano pequeño, Raúl (19 años), en silla de ruedas por una parálisis cerebral.
"Los éxitos que está consiguiendo mi hijo son únicamente y exclusivamente fruto de su trabajo y de su esfuerzo. Lo sabemos muy bien todos los que estamos a su lado", dice su madre. "Querer es poder, esa es su frase preferida".