Registros de Guariniello y huida de dos austriacos

Raffaele Guariniello, fiscal de Turín, ordenó el sábado por la noche el primer registro a una selección. Los damnificados fueron los equipos austriacos de esquí de fondo y biatlón, que recibieron la visita de los carabinieri en sus sedes de Pragelato y San Sicario durante cerca de cinco horas. Horas después, los biatletas Wolfgang Rottmann y Wolfgang Perner abandonaron Italia pese a que aún restan dos pruebas de relevos y ambos forman parte de los equipos austriacos que participarán en ellos.

El detonante es Walther Mayer, ex entrenador de Austria. La Fiscalía tiene noticias de que está en los Juegos. Hace cuatro años, Mayer se vio envuelto en un escándalo en Salt Lake City 2002. En su habitación se hallaron jeringas y bolsas de sangre, usadas para hacer transfusiones a su hijo Marc y a Achim Walcher. El COI los suspendió ocho años. Guariniello sigue su rastro, pero no lo ha localizado. "Mayer ha alquilado una residencia en San Sicario, pero no estaba allí el sábado por la noche", comunicó Mario Pescante, supervisor del Gobierno italiano. El propio COI ha ralizado controles a diez austriacos. La delegación de Austria está indignada. Su equipo de relevos de 4x10 km se clasificó ayer el último. "Fue una noche larga, no acabaron hasta las cuatro de la mañana. Nos arruinaron la carrera", dijo Martin Tauber. Pese a sus quejas, fuentes policiales han revelado que alguien tiró una bolsa por una ventana con jeringas y productos.