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Juegos Mediterráneos Almería 2005 | La jornada

Balonmano: el Dream Team del Mediterráneo

Lissavetzky: "Habrá un Consorcio de empresas para Pekín-08"

Tomás Guasch
<b>ENCANDILAN. </b>La Selección de balonmano engancha con el público. No sólo juega bien y gana, como ayer; está en la final y tiene una relación de complicidad con los aficionados.

Era la revancha de la semifinal del Mundial, cuando apartamos a Túnez de su final. Tenían los tunecinos la mirada del tigre y venían con todo. Nosotros íbamos con Pastor al frente, un tipo éste que sabe mucho y/o tiene una flor en el culo: así como Camacho se llevó a Lozano, el seleccionador del fútbol sala, al Mundial de Corea, yo, si fuera Luis Aragonés, me llevaba a este Pastor al partido de septiembre contra Serbia: esto es un talismán en serio. Además, un gran golpe: uno llega al pabellón y se cree que Iván de la Peña se ha cambiado de deporte. Se trata de Demetrio Lozano, que si el lunes se pasa por Las Peñucas, en Santander, a celebrar el título, no le cobran.

La Selección de balonmano es el Dream Team del Mediterráneo. ¡Quién tuviera un equipo de fútbol así, unos tanto y otros tan poco! Aquí no están Romero, Garralda Alberto Entrerríos, Uríos, Juancho Pérez, Hombrados y alguno más. Da igual. Se les recuerda porque son magníficos, pero los que han venido confirmaron que en el balonmano español hay base, altura, ambición, calidad y pasión para poner patas arriba Roquetas y todo Almería con el partidazo que jugaron. Un grupo de legionarios les cantaba el ¡Novios de la Muerte! en plena expresión de orgullo patrio: si cuando acabó el partido les dan la orden, en diez minutos toman Marrakech. ¡Gloria a Fis, Parrondo, Morros, Sierra y Prieto, todos a las órdenes de Barrufet, que por si justifica la presencia del Barça en el mundo!

Notas de Lissavetzky

. Total, que el balonmano llama a la puerta de los héroes de estos Juegos donde están la nadadora Sara Pérez (oro, plata y dos bronces) y el gimnasta Rafa Martínez (cuatro oros y un bronce), nuestros reyes. Sucedió el día que Jaime Lissavetzky, secretario de Estado para el Deporte, se asomó a los medios y protagonizó una conferencia de prensa-milonga inolvidable junto a José María Echevarría, presidente del COE. Tres toquecillos: "Estamos en el horizonte de las 130 medallas, muy contentos con los resultados y la organización"; "Italia y Francia siempre han estado por encima, los milagros en Lourdes" y "amparada en la Ley de Mecenazgo actual, el 15 de septiembre se creará el Consorcio Pekín-08 que permitirá a nuestras empresas unas desgravaciones fiscales especiales con vistas a esos Juegos".

El día se completó con dos medias verónicas sensacionales: hubo que despedir al informático de la hípica, pues nadie entendía sus clasificaciones; la luchadora Mar Serrano fue bronce pese a perder su único combate: no fue un milagro, sucedió que se retiró una de las competidoras y se corrió el turno.