Landaluze
"Nunca arrojé la toalla, ni perdí la concentración"
Ha sido un parto difícil, pero ha salido un hijo precioso.
Sí, así es. He tenido que sufrir mucho, pero al final he ganado la carrera y eso es lo que queda. Para mí, que no tenía triunfo alguno en mi palmarés, es muy importante vencer en una gran vuelta como es esta.
¿Hubo algún momento en que la vio perdida?
El peor momento fue en el primer puerto de cuarta, antes de llegar al circuito. Atacó Vinokourov, intenté salir por él y me quedé fundido en un segundo pelotón por detrás de todos los grandes. Por suerte, enlazamos en el descenso y a partir de ahí he ido a mejor.
Pero se ha descolgado en las tres últimas ascensiones.
Es que aquí competía con parte de los mejores ciclistas mundiales y era difícil seguir su ritmo. Pero nunca perdí la concentración y creo que he corrido de una forma muy inteligente. No soy un corredor explosivo y en vez de cebarme con las arrancadas, trataba de seguir a mi ritmo. Veía que tampoco era excesiva la diferencia que me sacaban en la cima y me lanzaba en el descenso. No me puse nervioso y tampoco entregué en ningún momento la toalla. Creo que eso me ha dado la victoria.
Roto el hielo en su palmarés, ¿hasta donde puede llegar?
Pues no lo sé. He tardado mucho en explotar, pero cada año he ido progresando un poco más. No sé cuál es mi límite, pero esta claro que he conseguido un triunfo muy importante y me voy haciendo un nombre.
Ahora, el Tour.
Allí iré a ayudar a Iban Mayo. Hemos tenido una temporada difícil, pero este triunfo señala que vamos por buen camino.