Ciclismo | Bicicleta Vasca
Eladio Jiménez sentencia tras una larga escapada
El salmantino sacó ocho minutos al resto de favoritos
La Bicicleta Vasca quedó sentenciada ayer con una larga escapada que concluyó con una aplastante victoria de Eladio Jiménez. El salmantino del Comunidad Valenciana dejó atrás a sus nueve compañeros de fuga y entró en la meta de Tolosa con unos ocho minutos de ventaja sobre el resto de favoritos de esta carrera. Quedan tres días de carrera, con cuatro etapas a cubrir en ellos, pero, aunque los trazados son complicados, sólo un accidente o un desfallecimiento podría privar a Eladio del triunfo final.
Julián Eraso, director de la prueba, se quejaba en AS, de la complicada situación en que les había dejado el ProTour para poder conformar un pelotón competitivo. Sólo han hecho falta dos etapas para que se cumplieran sus más negativos presagios. La Bicicleta Vasca siempre ha sido una gran carrera que habitualmente mantenía el interés hasta al última etapa. Ayer se quedó en una carrera insulsa por culpa del descontrol generado en un pelotón falto de hombres de peso para poner orden.
Salvo el Barloworld, los equipos extranjeros han venido aquí a pasearse y los grupos españoles potentes no han alineado a sus mejores espadas, los reservan para la Vuelta a Suiza y el Dauphiné Liberé. En estas condiciones una escapada tonta de diez hombres (km 43) se transforma en decisiva.
Falló el Saunier Duval, que no había metido a nadie en la fuga y sólo se decidió a tirar cuando los fugados tenían ya diez minutos de ventaja (km 96). Pero ya era tarde y además no encontró ayuda y levantó el pie.
De los fugados, el mejor con diferencia fue Eladio Jiménez, que pasó en cabeza por los siete puertos de la etapa y se quedó sólo en el quinto, a 42 km de meta. En esa distancia le sacó 2:40 a Aketza Peña, segundo clasificado, y 3:03 Palomares y Cavallari.
Estos dos últimos son los que más cerca han quedado en la general, a casi tres minutos. Distancia más que suficiente para Eladio Jiménez, que era uno de los favoritos de la carrera.
Sus rivales más peligrosos entraron a ocho minutos. Estas son las penurias que nos está dejando el ProTour, del que seguimos sin ver los beneficios.