Al Boomerang le salvó la campana ante Carnicer

Los campeones suspiraron con el bocinazo final, 6-5 y un partido para analizar por ambas partes. Primero golpeó un Carnicer que salió centrado (0-2). La rotación de cambios fue debilitándole para diluirse como un azucarillo bajo un mazo verde que le hizo un parcial espectacular de 6-0 jugando a ráfagas. ¡Pero qué ráfagas! Incluido un gol bárbaro de Marquinho que empaló de volea y a la media vuelta a la red un pase que venía volando desde 36 metros. Interviú no se veía en otra, y nos referimos a la grada. Un equipo acusado de no tener afición, hacía vibrar a su nueva hinchada que respondió a la llamada con aplausos y coreando algunos nombres de sus jugadores. ¡Inaudito! 6-2 y la máquina se paró.

El Carnicer, que si aspira a algo no le quedará más remedio que trabajar mejor sus marcas en defensa, no se achantó y a 7 32 del final puso a Chupeta de portero jugador. Podía morir en el intento ante un contrario tan contundente. Pero qué va. Interviú se fue peligrosamente del partido y los torrejoneros conectaron bien en su juego de cinco al primer toque para hacer el 6-3, el 6-4 y el 6-5 a 53 segundos del final. Los pentacampeones se habían estampado contra su portería y salvaron el marcador porque sonó la campana.