Bueno para el Madrid
Florentino Pérez llegó a la presidencia del Real Madrid hace cuatro años cumpliendo su gran promesa deportiva electoral: el fichaje de Figo. Y el presidente va a dar carpetazo hoy a su primera legislatura cumpliendo con otros dos deseos confesos del madridismo: la renovación de Roberto Carlos y el rescate para la causa de Morientes. Eso es como marcar dos golazos desde 30 metros. Con la continuidad del brasileño se tapona una herida que tenía visos de convertirse en el primer agujero de la Era Camacho. Esa banda izquierda iba a quedar en manos de cualquiera y suponía un lujo innecesario teniendo en casa al tres más cualificado del planeta. Macaco for ever. Bueno para el Madrid.
Camacho, que ha demostrado con Robertinho más poder de seducción que el trasero sublime de Jennifer López, ha logrado también que el Moro intente apurar los dos años de contrato que le restan. Cierto que el Chelsea retiró su oferta hace un par de semanas tras desechar a Deschamps y fichar a Mourinho, pero al menos Morientes sopesa aguantar ser suplente de Ronaldo gracias a la confianza ciega que le ha demostrado Mad Max Camacho. Sólo falta que caiga Xabi Alonso para completar un hat-trick de despacho que pondría alfombra roja a la elección de Florentino.