Reyes y Mista se quedaron en tierra

Salió la lista de Portugal, una lista que refleja el estado del fútbol español: sobran delanteros y faltan defensas. Lo contrario sería peor, desde luego. Pero esto no es del todo bueno, porque a la hora de responder al sensato afán de llevar a dos jugadores por puesto resulta que por abajo ha habido que meter bastante relleno y por arriba han quedado fuera dos jugadores brillantes y en forma, Reyes y Mista. Duele verles en tierra. El primero es un exquisito que puede alterar el ritmo de un partido. El segundo es el máximo goleador nacional y acaba de resolver la final de la UEFA.

Se puede discutir su ausencia, desde luego pero, ¿a quién quitamos? A Gabri y Juanito, me dicen algunos. Bien, pero es que la parte de atrás es la que suele ser más castigada por las tarjetas y si, como es de esperar, avanzamos en el campeonato, habrá necesidad de estos reemplazos que, gusten o no, son los que hay. Eso es lo que da el fútbol español, flojo de centrales, carente de laterales izquierdos y con Manuel Pablo lejos de lo que fue. ¿Y arriba? ¿A quién quitamos? ¿A Raúl y Valerón por su baja forma? ¿Quién se atrevería? ¿A Morientes, a Torres, a Luque...? Son todos buenos.

A mí me sabe particularmente mal el caso de Mista, cuyo estallido en esta temporada es un fenómeno que ha arrollado a Sáez , que nunca se decidió a llevarlo a ningún ensayo, oportunidad que sí tuvieron Salva y Tamudo, por ejemplo. Su extraordinaria forma y su estado de gracia ante el gol contrastan dramáticamente con el hundimiento de Raúl, que nos tiene desconcertados a todos. Pero Raúl se ha ganado que le esperemos. Lejos del ambiente depresivo y engandulado del Madrid quizá pueda recuperar el tono. Le avala la historia y es el líder natural del grupo.