NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Lissavetzky, Gómez Angulo...Vila-Matas y McGonagall

Aclaro. Enrique Vila-Matas es un notable escritor catalán. Hace poco publicó un artículo sobre un autodenominado "poeta" escocés de nombre W. Topaz McGonagall, nacido en 1.902 y que comenzó a perpetrar rimas a los 47 años. Recitaba sus poesías y la gente se partía de risa. En un tiempo récord ya se le consideraba como el peor escritor en lengua inglesa de todos los tiempos. Esta semana Jaime Lissavetzky ha sido nombrado secretario de estado para el deporte en sustitución de Gómez Angulo, quién a lo largo de sus cuatro años de mandato sólo será recordado por su anómalo calentón en Sydney y por la apasionada querencia en mostrarse allí donde hubieran cámaras. Aparcar la faena y ágil huida de los problemas. Una marca difícil de batir.

En 2002, el ayuntamiento de Dundee acordó rendir homenaje póstumo a McGonagall con motivo del centenario de su nacimiento. En uno de los puentes sobre el río Tay se grabó uno de sus peores poemas. Costó trabajo decidirse por cual de ellos. "Su poesía es tan mala que es memorable", sentenció orgulloso el director del evento. Sospecho que el nuevo presidente del Consejo Superior de Deportes se habrá encontrado una mesa repleta de carpetas con el epígrafe "pendiente de resolución". Una colosal herencia de trabajo por hacer. Tanto que alguien podría pensar que es una auténtica golosina para una persona diligente, profesional y dialogante. Pero no lo va a tener fácil Lissavetzky, quién a juzgar por su trayectoria reúne este perfil. Los cuatro años de "chau-chau", sonrisas y " laissez faire, laissez passer " de Gómez Angulo respecto a varias federaciones, inevitablemente conducirá a situaciones de tensión cuando el sucesor se decida a encarar la realidad y actuar en consecuencia.

McGonagall. "Rendimos homenaje -dijo el alcalde de Dundee- a un hombre que dedicó su vida, de forma increíblemente inepta, al arte de la rima y de la métrica. Nadie puede superarle como reverso de Lord Byron". El deporte merece que la obra que legue Lissavetzky a su sucesor sea el revés de la que acaba de heredar de Gómez Angulo. Recalco: la obra; por lo demás cada cual es dueño de su personalidad. Y un último apunte sobre la figura de William Topaz McGonagall: según cuenta Vila-Matas no nació en Dundee, sino en Edimburgo, ciudad en la que no quieren saber nada de él.