A la UEFA sin presión

Nadie del Málaga quiere hablar de UEFA. Todos los miembros del club, técnicos, jugadores y dirigentes se muestran cautos. Con la permanencia casi conseguida, el siguiente objetivo es la competición europea, aunque para llegar al quinto o sexto puesto, lo mejor es ir partido a partido. Los nueve encuentros que quedan pueden ser dramáticos y a la vez bonitos. Estoy seguro de que Juande Ramos no va a dejar que la plantilla se relaje como sucedió en la temporada pasada cuando se obtuvo el objetivo. El talante es diferente. Hay competitividad. Ningún futbolista se puede dormir porque no hay titulares ni suplentes. Juega el que se lo merece y el que en mejor forma está. Antes salían Darío y Musampa, por poner unos ejemplos, pero había otros compañeros en perfectas condiciones que se entrenaban duro durante la semana.

Además, existe una gran cordialidad y un compañerismo en el vestuario que no es el del hace unos meses. Todo ha cambiado. Las primas están fijadas y el equipo es una balsa de aceite. Por este motivo, creo y pienso que habrá lucha hasta el final y que los profesionales malaguistas buscarán la UEFA. Otro cantar será que puedan acabar en los puestos europeos. Intentar lo van a intentar y por eso habrá que premiarles el domingo contra el Albacete con una sonora ovación, en la que incluirán el triunfo conseguido en Sevilla. Estamos con ellos.