Este asalto lo ganó Queiroz

Queiroz hizo una concesión al club y rotó y tiró de la cantera. La alineación inicial sorprendió: Portillo por Ronaldo, y Borja, prácticamente desconocido para la afición, por Helguera. Dos nuevos pavones en pista y Florentino en el palco, seguro que satisfecho porque por fin Queiroz daba muestras de confiar seriamente en la cantera. Pero el resultado no fue alentador. Portillo no tuvo su tarde ni marcó, aunque eso fuera lo de menos. Sus posibilidades son conocidas y reconocidas. Pero Borja dio una impresión muy pobre. Tan pobre como para poner en cuestión el modelo.

En el club se debate si hay que fichar en diciembre o no. Queiroz es partidario de ello y lo dice. Valdano también, aunque prefiere callarlo. Florentino siempre responde; ahí está la cantera. Pero los que piensan en contra argumentan que la cantera no da siempre raúles y casillas. Que hay periodos tan poco felices como para que el filial se atasque un año y otro en Segunda B y sea incapaz de ascender. Y que el modelo ya era exagerado antes de que se produjeran los contratiempos de Makelele y Milito y que sin ellos completar la plantilla con la cantera es pedir demasiado.

Y a estos vino a darles la razón Borja, con su pálido partido, que vino a sumarse a la desdichada tarde de Portillo y al recuerdo, aún reciente, del pinchazo de Rubén en Sevilla. La imagen de un Madrid netamente inferior al Albacete durante casi una hora (magnífico el juego de los manchegos, con calidad y soltura) avala a los que piensan que la plantilla es corta, y que en cuanto hay bajas aparecen los problemas. Igual que al no poner a Olalla Queiroz irritó a Florentino, al poner a Borja le ha hecho dudar. Y ahora está más cerca que nunca de conseguir algún fichaje en diciembre.