L-Í-D-E-R-E-S

Happy saturday. Fue un Sábado real, monárquico (eso sí, nuestro Príncipe ha dejado claro que a él le va la Leti, ingeniosa broma cuya autoría corresponde a mi amigo Carmelo) y ronaldiano. Está visto que al megacrack brasileño no conviene tocarle esos atributos (futbolísticos) tan envidiados por ese Tendido del 7 que aprovecha cualquier flaqueza para lanzarse como las hienas a la yugular del genio. Ronaldo destrozó la autoestima de los charlatanes de feria (y no me refiero a Queiroz, lo juro) que ya ensayaban el réquiem de este 9 grandioso, capaz de arruinar a todas las clínicas de dietéticas de este país y de acabar con los prejuicios. Ronaldo está en su peso ideal, porque esa corpulencia lo convierte en un bombardero imparable capaz de recuperar a lo grande la gloriosa imagen del Ronie del Barça. Su segundo tanto a Aranzubia fue una explosiva mezcla de Pelé (por lo espectacular), de Di Stéfano (por la calidad), de Maradona (por la vertiginosidad) y de Puskas (por la definición). Fue el GOL...

Abonado Aznar. Como ya sabe que le queda poco en la cima del poder político, José María Aznar ha optado por convertir en normal lo que hasta hace poco era noticia. De nuevo le vimos bromeando con Florentino en el nuevo palco del Bernabéu, por lo que el presidente del Gobierno debe reconocer en su próxima comparecencia pública que ya es abonado del Real Madrid. Como el Rey Juan Carlos, aunque ayer Su Majestad estaba en otro partido.

O Rei Iker. La velada dio protagonismo a los pavones de ambos equipos (Casillas, Bravo, Guti, Aranzubia, Jonan García, Gurpegui...) pero el que se llevó todo el oro, el incienso y la mirra fue Iker, nombre vasco que defiende el orgullo blanco con una coreografía que gana crédito cada día que pasa. Casillas dio un cursillo acelerado de cómo debe manejarse el portero del siglo XXI,. Elástico, ágil de reflejos, felino, estético, seductor, desequilibrante y gaviotero (sus vuelos son dignos de una banda sonoro de Mike Oldfield). Cuando firmó ante Sequero en el último minuto su décimo paradón de la noche todo el Bernabéu se puso en pie y unió sus voces al grito emocionado de: Iker, Iker, Iker....”. Mi sobrino Gonzalo (12 añitos) quiere ser Casillas de mayor. Ni Ronaldo, ni Figo, ni Zidane. Sólo Iker. Y así millones de niños. Por eso es el séptimo galáctico. Totus Tuus, amigo.

Escocia. Que el Madrid se ha convertido en un equipo de dibujos animados (el Pictures Animations Team, que diría Beckham) es una realidad contratada en los cinco continentes. Antes del show me encontré en El Cachirulo (histórico bar maño de la calle de Concha Espina) a seis escoceses ataviados con su falda tradicional (kilt) ¡y seis camisetas del Real Madrid con una pequeña bandera de Escocia pegada a los escudos blancos! Estamos asistiendo a la evangelización del planeta sin necesidad de recurrir a la fuerza de las armas. Lastima que Salgado haya decidido dejar esta fiesta. Él era uno de los nuestros, pero el 30 de junio se despedirá a lo grande. La afición le pide que lo reconsidere, pero los petrodólares rusos de Abramovich tiran y hay que respetarlo. Ya saben, Míchel Salga...do.

¡Líderes! El Murcia de los hermanos Samper (por algo llevan sangre blanca en sus venas) dieron una asistencia clasificatorias arrancando dos puntos al Depor que pusieron al Madrid el liderato en bandeja. Gracias por los servicios prestados. El Athletic también puede volver al Botxo orgulloso, porque los Ezquerro, Tiko y Etxeberría dieron la cara (aunque se la partiese Ronie con su inmisericorde estilo). Los leones acabaron el partido como cachorros, pero con las uñas afiladas. Valverde es un técnico valiente (como lo era su fútbol), por lo que auguro a los hijos de San Mamés muchos años en la élite. Igual que a Raúl...¡Bravo! Central crack. Es como la histórica canción de Alphaville: Forever Young (siempre jóvenes). Algún día recordará esta época así: Aquellos maravillosos años.