Raúl nació para el fútbol en Zaragoza

Raúl González Blanco vuelve al lugar de los hechos. A Zaragoza. A La Romareda. A la cuna futbolística del Pavón de los años 90. Del tipo capaz de enterrar con sólo 17 añitos a un mito como Butragueño. El destino ha querido que se cumplan los nueve años del siete en el mismo escenario. Allí ha crecido como futbolista y como persona. El día de su debut jugó con el desparpajo de Juanito, el coraje de Stielike y la velocidad de Gordillo. Esa noche sólo le faltó tener la precisión rematadora de Hugo Sánchez...

Nada más arrancar el partido Laudrup le dio uno de sus pases con el retrovisor (mirada a un lado y balón a otro), encaró a Cedrún, lo dejó sentado de bruces y su remate a puerta se fue alto. Era la pierna derecha. La mala. Pero ahí estaba. Y así se pasó todo el partido. Amagando, moviéndose entre líneas, chutando... Un crack imberbe.

Allí también marcó Raúl su gol número 100 en Liga (15-4-00). Un año antes había firmado un tanto antológico ante Juanmi con una vaselina rauliana. La Romareda es su campo talismán. Y allá va. Nueve años después. Con más kilos (de músculo), más hechuras y más títulos. ¿Y su talento? Ése no cambiará nunca...

Cedrún: "Supe que sería el mejor"

Cedrún fue el primer portero que Raúl se encontró en su carrera como profesional. En declaraciones a AS, el portero vasco afirmó hace un año: "Esa noche supe que Raúl sería el mejor. Víctor Fernández tuvo que ajustar la defensa en el descanso porque ese chico nos estaba volviendo locos. Me dio mucha lata. A Raúl sólo le faltó marcar...".

"Se salió, pero le faltó el gol"

Jorge Valdano, primer entrenador del Madrid en aquella histórica noche de La Romareda, es sumamente gráfico cuando se le pide una valoración sobre la actuación que tuvo Raúl en su debut ante el Zaragoza: "Cierto que tuvo cinco ocasiones de gol y no aprovechó ninguna de ellas, pero para mí fue con diferencia el mejor jugador del Madrid. Siempre buscó el desmarque, cogió varias veces la espalda a la defensa, habilitó a Zamorano con un espléndido pase en el gol del 2-1, desajustó su sistema de contención e incomodó a Cedrún con sus continuas apariciones. Un crack". Nueve años después, Valdano verá a Raúl... desde el palco.