NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Tres años que cambiaron el fútbol

Hace tres años, Florentino accedió a la presidencia del Madrid. Una semana más tarde, Gaspart ocupó la del Barça. Por entonces, los dos clubes estaban en una posición más o menos próxima. El Madrid acababa de obtener rutilantes éxitos deportivos (dos copas de Europa en tres años) pero el Barça podía presumir de una solvencia de la que carecía el Madrid, tenido por una entidad sometida a una administración desordenada, cargada de deudas y que sobrevivía gracias a una racha de buena suerte, sin base que la sostuviera. Al cabo de tres años el retrato es muy otro.

Hoy el Madrid asegura que ha obtenido el equilibrio presupuestario. Lo ha hecho a través de un camino audaz, la contratación de jugadores extraordinarios en la confianza de que con éstos llegaría la mayor afluencia de espectadores al estadio, los aumentos en los derechos de televisión y los grandes ingresos por mercadotecnia. Y, antes, durante y después de todo eso, los éxitos deportivos, de los que depende todo lo demás. Así que Florentino, que arrancó con Figo, siguió con Zidane, prolongó por Ronaldo y remató, por el momento, en Beckham. Hizo un equipo galáctico.

Mientras, Gaspart fichó cada año una punta de medianías, diecisiete en total, de los que hoy parece que a Rijkaard sólo le sirve uno, Overmars. Por el camino han ido quedando, o quedarán, Dutruel, Petit, Gerard, De la Peña, Alfonso, Andersson, Bonano, Christanval, Coco, Geovanni, Rochemback, Saviola, Enke, Mendieta, Riquelme y Sorín. Curioso: el Barça se gastó tanto en tanta medianía como el Madrid en sus galácticos. Los resultados están ahí: el Madrid es tan bueno como en su mejor época y el Barça tan malo como en su peor época. El fútbol ha cambiado mucho en tres años.