Manolete, vete al Hotel Glam

Manolete, me has convencido. Espero que la dirección de Tele 5 y tu admirado Jesús Vázquez aprueben mi humilde sugerencia y te admitan en la próxima entrega de Hotel Glam. Hablas como si estuvieras poseído por Pocholo, como si te hubiesen hipnotizado los labios recauchutados de Yola Berrocal, como si Malena te hubiese puesto todo a 100 y como si Aramís Fuster te convenciera de que con tal de chafarle la Liga al Madrid el premio compensará hasta la más atrevida de tus fantasías...

Te aprecio más de lo que mereces, pero de verdad que me angustia que pienses que la olla a presión del Calderón vaya a servir para fagocitar el talento desatado de Figo, Raúl, Ronaldo, Robertinho o Zidane. Has pifiado en el ejemplo que has puesto. Claro que la Bombonera es una hoguera de pasiones excitante. Pero te recuerdo que ahí desplegaba su ingenio un tal Maradona. Tú ni sabes lo que es eso... Mira, la afición del Atlético me parece admirable y jamás caeré en tu falta de respeto hacia el madridismo ("prepotentes, pijos, etc."). No nos conoces. La afición del Madrid encajó el robo arbitral de la primera vuelta (¿te suenan un penalti inventado de Roberto Carlos y una expulsión hiperbólica de Helguera?), pero no lanzó un solo objeto. Es gente exigente que no llora porque prefiere mamar con la cabeza alta. Te digo más, Manolete. Sigue bramando en el desierto porque ni siquiera los atléticos más recalcitrantes te van a hacer caso. Ellos no son borreguitos. Saben lo que hay. Entre (la) Real y (el) Real nunca escupirán hacia arriba. ¡Reacciona, por Dios!