Mandó el Albacete, pero resistió el líder

Albacete y Zaragoza empataron ayer en un partido jugado de poder a poder. El choque resultó muy igualado, con mucha presión en el centro del campo y con pocas ocasiones por parte de ambos equipos, si bien el que más se acercó a la meta rival fue el Albacete. Este resultado mantiene una jornada más al Zaragoza al frente de la clasificación de Segunda División, mientras que los albaceteños pueden arrebatar una plaza de ascenso a Murcia y Levante si estos equipos pierden hoy.

La primera mitad fue de claro dominio local. El Albacete se hizo dueño del centro del campo ante un Zaragoza muy bien posicionado sobre el terreno de juego. Todas las ocasiones fueron del equipo de César Ferrando. La primera, en el minuto 18, en un disparo de Jesús Perera que se marchó fuera. Un minuto más tarde, el mismo protagonista pudo ser objeto de penalti, pero el árbitro entendió que no hubo falta de Láinez sobre el delantero.

A punto de concluir los primeros 45 minutos, un centro chut del francés Ludovic Delporte, que debutaba en el Carlos Belmonte, estuvo a punto de sorprender al guardameta maño.

En la segunda mitad, el Albacete dispuso de su ocasión más clara en el minuto 52. Basti, dentro del área, disparó y Láinez despejó espectacularmente a saque de esquina. El conjunto local, a raíz de esa ocasión, empezó a notar el desgaste y el Zaragoza fue haciéndose poco a poco con un mayor control. En el minuto 67, los visitantes tuvieron su mejor oportunidad para batir la meta del argentino Carlos Roa, en un remate de cabeza de Galletti con mucha potencia pero poca colocación, pues remató al centro y sin muchos problemas para el guardameta local.

En el minuto 76, el Zaragoza reclamó un posible penalti de Pablo sobre Galletti, que Fernández Hinojosa no decretó. Poco después, el conjunto aragonés se quedó con un jugador menos por la expulsión de Galca tras una entrada sobre Duré. El conjunto local, sin embargo, no supo aprovechar su superioridad numérica y jugó con más corazón que cabeza, sin orden ni concierto, con el consiguiente enfado de su entrenador, que criticó la excesiva precipitación de los suyos.