Sevilla lleva seis días enfermo del hígado

El bajo rendimiento de Óscar Sevilla en el Tour de Francia tiene una explicación. El escalador de Ossa de Montiel lleva seis días arrastrando una enfermedad en el hígado y, lo que es peor, sin recibir la asistencia médica apropiada por parte del equipo Kelme-Costa Blanca. El ciclista manchego estuvo a punto de no tomar ayer la salida en la etapa y al final la terminó a duras penas, a más de ocho minutos de su compañero Santiago Botero.

El médico del equipo Kelme desplazado a este Tour es Yolanda Fuentes, hermana del titular, Eufemiano Fuentes. Óscar llevaba varios días comentándole su problema, pero hasta ayer no se había tomado ninguna medida. Ante su impotencia para encontrar una solución a la enfermedad de Sevilla, la doctora recurrió ayer por la tarde a un colega del equipo Lampre, el también español José Ibarguren, que por fin encontró un diagnóstico: el hígado no le drena bien y tiene una importante acumulación de líquidos.

Sevilla tiene problemas para orinar y sufre fuertes dolores de cabeza y constantes mareos. Ayer aguantó el ritmo de la etapa como buenamente pudo hasta el último puerto, Dos Alpes, donde tuvo un desfallecimiento. Gracias a la ayuda de su compañero Quique Gutiérrez pudo llegar a la meta, pero cada día va a peor y seguramente no podrá continuar en el Tour de Francia.

El escalador de La Mancha tomará hoy la salida en la etapa reina, pero todo apunta a que se verá forzado a abandonar. Ante un problema de semejante gravedad, llama la atención que Sevilla no haya sido ya trasladado a un hospital para someterle a pruebas médicas que dieran un diagnóstico más fiable, como por ejemplo una ecografía.

En el pelotón no ha pasado inadvertido el mal estado físico de Sevilla. Varios corredores venían comentando desde hace unos días que el manchego está muy hinchado. Ayer acabó la etapa con el abdomen completamente inflamado. También se le hinchan las extremidades y ha perdido el apetito. Su Tour se ha acabado.