NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Ciclismo | Vuelta a España

Del lanzamiento de peso al ciclismo

César García Calvo (Relax), el Jabalí del Bierzo, competía contra Manolo Martínez antes de dedicarse al ciclismo. Tuvo que adelgazar hasta 15 kilos

Actualizado a
CICLISTA DE PESO. García Calvo ha tenido que trabajar muy duro para hacerse un hueco en el pelotón.
JESÚS RUBIO

César García Calvo, el corredor del Relax-Fuenlabrada al que todos apodan el Jabalí del Bierzo dentro del pelotón, interrumpió su carrera como atleta a los 20 años de edad para dedicarse al ciclismo.

Cosas de la vida. Su familia apenas tenía dinero para costearle los desplazamientos a las competiciones nacionales de atletismo. Nunca se sabrá si en ese preciso momento nuestro país perdió una estrella del tartán, pero de lo que no cabe ninguna duda es de que sí se ganó a uno de los mejores rodadores del pelotón español. Al tiempo.

García Calvo, lejos de lo que pueda parecer por sus características físicas actuales, no era un atleta mediocre. Y así lo demuestran sus resultados: llegó a ser campeón juvenil de León de lanzamiento de martillo, se proclamó campeón provincial sénior de 800 metros, ganó una media maratón a Covadonga... Además, siempre podrá presumir de haberse enfrentado en numerosas ocasiones a Manolo Martínez en lanzamiento de peso, aunque nunca consiguiera ganar al actual plusmarquista español de esta modalidad.

Ni siquiera se le acercó. "Yo estaba condenado al segundo cajón del podio, con un lanzamiento de once metros aproximadamente. Manolo Martínez me aventajaba siempre en cinco o seis. Por entonces, él ya pesaba 120 kilos".

Metamorfosis

¿Y cuánto pesaba el Jabalí del Bierzo? "Yo rondaba los 85 kilos, mientras que ahora mismo mi peso oscila entre los 70 ó 71. Estaba claro que debía adelgazar mucho para poder pasarme al ciclismo", aclara César. Su metamorfosis fue total. Su grasa corporal la redujo del 18% al 5,3%. Además, sus datos médicos asustan: un 89,9 de capacidad pulmonar y 600 watios de potencia.

Su cambio no fue sólo físico, porque con 20 años tuvo que adaptarse a un deporte totalmente desconocido para él. "Recuerdo que al principio no hacía más que caerme de la bicicleta, porque me costaba mucho rodar dentro del pelotón. Aún no he olvidado mi primera carrera. La disputé con una bicicleta de talla 50, cuando ahora mismo utilizo una de 55. Corrí con unas zapatillas deportivas y até muy fuerte los cordones a los pedales para ir bien sujeto", cuenta con media sonrisa.

A partir de entonces, César García Calvo fue aprendiendo a pasos agigantados. "Empezar muy tarde también tuvo su lado positivo, pues siempre he notado más progreso que los demás corredores".

Como ciclista amateur, García Calvo llegó a sumar más de 40 victorias en un total de cinco temporadas; como profesional ya ha conseguido tres triunfos. Muchos le comparan con Chente García. Por algo será.