La apuesta de Teresa Portela
La gallega (42 años) sale el jueves a por medalla en sus séptimos Juegos y tras ser plata en K1 en Tokio en el K4 500. También los chicos de Craviotto y el C2 500 de Moreno y Domínguez.
Siete Juegos, 28 años si se miden en ciclos olímpicos. Desde Sídney 2000 a París 2024. Siete finales y una plata. Es el recorrido de Teresa Portela, (Cangas, 42 años) que paleará este jueves en las semifinales de K4 500 (11:40 y final a las 13:40) en busca de una segunda medalla junto a la asturiana Sara Ouzande, la extremeña Estefanía Fernández y la gallega Carolina García. También buscarán meterse en sus finales el K4 500 masculino (semifinal a las 11:50 y final 13:50) y el C2 de Joan Antoni Moreno y Diego Domínguez (última criba a las 11:20 y final a las 13:30).
Teri, la española con más participaciones y sólo con el marchador Chuso García Bragado por delante (8), logró su ansiada medalla en K1 200 tras un sexto, dos quintos y un cuarto puestos previos. Nunca pensó en retirarse tras el éxito, pero el K1 200 salía del programa en París y le obligaba a reinventarse. Entonces, le llegó la propuesta de la Federación Española de trasladar de Sevilla a Verducido (Pontevedra), donde ella entrena, a las tres palistas que ahora son sus compañeras para montar un K4. Una incógnita y una nueva ilusión.
“A estas alturas de mi vida debo buscar retos emocionantes y este me lo pareció, como también a mi entrenador (Daniel Brage)”, recuerda. Y con mucho trabajo llegó un bronce mundial el año pasado. Estaban en la línea de salida para algo grande.
“Fue una apuesta, cogimos todo y nos fuimos las tres a compartir piso a Galicia”, cuenta Estefanía Fernández (28 años). De Teresa han bebido “su calma, cómo hacer que no te bloquee la presión en una situación así, la de una final olímpica”, sigue la extremeña, graduada en Psicología, algo que también le viene muy bien al grupo.
“Aquí no hay secretos para estar más de veinte años en la élite, sólo trabajo, constancia... cada entrenamiento cuenta porque si no me relajaría. Es un paso más hacia el objetivo, y yo siempre he sido de marcármelos a corto plazo”, apunta Portela, madre y con dos carreras (Magisterio, Fisioterapia y Nutrición en curso). El K4 pinta muy bien, puesto que en la serie del martes entraron por detrás de las actuales campeonas del mundo, Nueva Zelanda, y por delante de las subcampeonas, Polonia. “La sensación es muy buena”, advierte la hormiguita Portela. Y de esto sabe.