El cónclave olímpico elige al papa del deporte: Samaranch, Coventry, Coe...
El COI celebra sus elecciones este jueves (14:30, TDP) en las que el español, hijo del que fuera presidente 21 años, es uno de los favoritos.


La 144ª Asamblea del Comité Olímpico Internacional, el cónclave más parecido al cardenalicio que decide los destinos de la Iglesia de Roma, elige este jueves (desde las 14:30, TDP) a su décimo presidente, que sucederá a Thomas Bach a partir del 23 de junio. Será por un periodo de ocho años, ampliable otros cuatro.
Y como en los cónclaves, en el que elige al personaje más relevante del deporte, también hay intrigas. Los cuchicheos no cesan y la tensión se respira en Costa Navarino, un resort turístico a 100 km de la originaria Olimpia. “Por el hecho de que no hagan preguntas no se va a adelantar la elección del presidente. Está prevista para mañana”, bromeaba el hoy Bach durante la sesión de presentación de otros informes.
Los candidatos son numerosos, más que nunca: el español Juan Antonio Samaranch (65 años, vicepresidente), la ministra de Deporte de Zimbabue y campeona olímpica de natación Kirsty Coventry (41) y el príncipe jordano Feisal Al Hussein (61 años) como miembros de la Ejecutiva y con más experiencia en el COI. Además, el mito del atletismo y presidente de World Athletics, el británico Sebastián Coe (68), el francés presidente de la Unión Ciclista Internacional David Lappartient (51), el japonés Morinari Watanabe (66) que dirige la Internacional de Gimnasia y el sueco-británico Johan Eliasch (63), que preside la de Esquí. Todos del cupo de presidentes de federaciones internacionales.
Quien salga elegido tendrá que lidiar con Donald Trump (Los Ángeles 2028 y Salt Lake City 2034), con las presiones para la readmisión de Rusia, con el embrollo de la participación de deportistas transexuales (todos abogan porque el COI establezca unas normas claras para preservar la justicia con las mujeres). También con mantener la salud financiera, porque el COI generó 7.300 millones de euros en el pasado ciclo que en su mayoría van a dirigidos a sostener un modelo de deporte ‘solidario’ con un reparto entre federaciones y comités olímpicos nacionales a razón de 4,3 millones diarios. Un sistema cada vez más amenazado por organizadores privados a los que no les preocupa la base.
¿Pero cómo se vota en el cónclave en el que no está permitido entrar con dispositivos electrónicos o teléfonos? De forma secreta y mediante un botón. Lo harán 106 electores (son 109 pero hay tres bajas, el japonés Yamashita, la china Zhang y el argentino Werthein). En cada ronda, en la que no podrán participar los que compartan nacionalidad con algún candidato (en el caso de Samaranch, Marisol Casado y Pau Gasol) se irá eliminando al menos votado, pero no se informará de quién encabeza la ronda, hasta que alguien obtenga mayoría absoluta. Tampoco votará Bach, pero tiene voto de calidad en caso de empate.

Coventry, a la que se tiene por preferida del esgrimista alemán, sería la primera mujer, y además africana, en presidir el COI, que siempre ha sido dirigido por hombres y todos menos uno (el estadounidense Avery Brundage) europeos. Asunto que no es baladí. Con Bach al frente, se alcanzó la paridad de género en 2024. Y casi en la Asamblea, donde hay 48 mujeres. Creció de un 20% a un 44%. Puede ser su momento.
Pero la elección está abierta y el cónclave en el que conviven aristócratas elegidos por cooptación, comités nacionales, federaciones, exdeportistas o miembros de países tan exóticos como Aruba, Burundi, Yibuti, Papúa, Palau o Bután es orgulloso e impredecible. “Será muy competido. Y en una carrera, aunque yo no sea un atleta, cuando se llega a la meta aceleras, no frenas para saludar, por lo tanto, toca acelerar en las últimas horas”, decía ayer Samaranch a EFE mientras arañaba últimas voluntades.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos