Doblete suizo con sabor español: fin a una maldición de 34 años
Lara Gut y Michelle Gisin, oro y bronce respectivamente, devuelven a Suiza al podio de supergigante. Shiffrin completa su primera prueba.
Las lágrimas de Michelle Gisin al recibir su medalla de bronce eran compartidas por todo un país. Treinta y cuatro años después, el himno suizo volvía a sonar en un podio de supergigante (esquí alpino), una disciplina que, en sus inicios, prometía más alegrías locales. Lo hacía, además, por partida doble. Lara Gut, entrenada por el español José Luis Alejo, se colgaba el primer oro de su carrera y estrenaba la máxima condecoración en el medallero nacional, tanto en categoría femenina como masculina. Un motivo más para sonreír, y uno menos para llorar, en un año tan duro como mágico. "Ha sido un inverno difícil", reconocía tras la carrera. Con la presea, Gut también se convierte en la primera campeona del mundo que, durante la vigencia de su título, conquista los Juegos Olímpicos. En Pekín, en su tercera participación olímpica, ya suma dos metales, pues logró el bronce en eslalon gigante. Un bronce en descenso en Sochi completa su palmarés en el certamen.
No es mayor por los pelos. En PyeongChang, Gut se quedó a 0.01 segundos de entrar en el podio de la prueba, en la que, a sus 29 años, ya ha conseguido el Globo de Cristal en tres ocasiones (2014, 2016 y 2021). Entonces, triunfó una Ester Ledecka que, sucumbiendo a las leyes de la lógica, no ha podido repetir su irrepetible - incluso para su autora - hazaña. En 2018, la checa eclipsó al mundo logrando el primer doblete olímpico en dos deportes distintos. Triunfó en el eslalon paralelo del snowboard, como se esperaba y como ha revalidado en esta edición, y sorprendió en un supergigante en el que hoy ha sido quinta, a +0.43 de una Gut perfecta en los sectores centrales. La suiza cogió seguridad en el tramo inicial, bordó las curvas más peligrosas y aguantó en un final para todos los públicos. "No sabía si sería suficiente, porque había buenas condiciones y había que arriesgar para marcar diferencias. He estado más tranquila arriba que en el tramo final", explicaba ya con el oro en sus manos.