JUEGOS OLÍMPICOS
Zapata y Peleteiro, medallas a saltos de dos colegas
El gimnasta, plata en suelo, y la atleta, bronce en triple salto, se hicieron amigos en la Blume y ella es madrina de Olympia, la hija de Ray.
Las medallas a saltos las ganaron dos colegas. Y una niña que nació en mayo, Olympia, podrá contar dentro de muchos años a sus nietos que su padre y su madrina, en un día de fogonazos en forma de brincos en Tokio, ganaron dos medallas la misma tarde y los dos se acordaron de ella. Una historia tan bonita que parece irreal, pero que sucedió. No fue un sueño. Dos metales lo confirman.
Ray Zapata (Santo Domingo, República Dominicana, 28 años), plata en suelo en gimnasia artística, y Ana Peleteiro (Ribeira, Galicia, 25), bronce en triple salto, se conocieron en la Residencia Blume de Madrid. Allí llegó ella desde Galicia en 2013 para asaltar la élite, aunque luego se trasladaría a Guadalajara con el maestro cubano Iván Pedroso, y allí sigue él en la sala de gimnasia. Dos deportistas con tanto flow, amantes del ritmo y la música, tenían que conectar. Y lo hicieron. Para la atleta Ray es su "hermano" y era en quien se apoyaba cuando venían mal dadas en el CAR de Madrid, lejos de la familia.
Peleteiro, que ha hecho virales sus bailes en Instagram y TikTok, ha contado con Ray en algunos. Quién mejor que un amante del reaggetón. Tanto se aprecian, que este quiso que la saltadora fuese la madrina de Olympia. Lo que no podían imaginar los dos es que un 1 de agosto de 2021, a 10.800 kilómetros de esa residencia Blume en la que comenzaron su amistad, los dos subirían al podio olímpico en el espacio de unas horas.
Sus medallas contribuyeron a colocar a España con siete metales en la tabla, 24ª en el medallero los Juegos de la pandemia. Se suman al oro en tiro mixto de Alberto Fernández y Fátima Gálvez, las platas de Adriana Cerezo (taekwondo) y Maialen Chourraut (eslalon) y los bronces de David Valero (mountain bike) y Pablo Carreño (tenis).
Ray, que se declaró "el número uno", hizo un ejercicio casi perfecto de ejecución en suelo sobre el tapiz del Ariake Gymnastics Center. Bajo la mirada de Simone Biles, que por sus problemas de ansiedad se dio de baja también en los concursos por aparatos pero acudió a animar a sus compañeras. Sólo Artem Dolgopyat logró superarle (14.933)... aunque en realidad no fue así. Los dos obtuvieron la misma puntuación y desempató la nota de dificultad del israelí.
Después, Peleteiro quiso ser protagonista de la mejor final de triple de la historia. Esa en la que Yulimar Rojas, su compañera de fatigas con Pedroso en las pistas alcarreñas de la Fuente de la Niña, superó por 17 centímetros (15,67) el récord mundial de Inessa Kravets, vigente desde 1995. La gallega no se quedó atrás, y batió por dos veces el de España para dejarlo en 14,87. Una locura.
España avanzó a saltos en un día tremendo. Esta semana llega también el piragüismo, un vivero, Sandra Sánchez y Damián Quintero en kárate, los equipos entran en la fase decisiva y se definirán las medallas de la vela… que apuntan a un puñado. Esto no lo sabe Olympia, pero se lo contarán su padre y su madrina. Ocurrió un 1 de agosto en Tokio.