España se mete en la final de chicos y chicas de dos sin timonel
España tendrá a sus dos parejas representantes en el dos sin timonel de remo en la final e intentando rascar metal. Menos suerte en doble scull ligero.
Los dos sin timonel de España en estos Juegos, Jaime Canalejo y Javier García en categoría masculina y Aina Cid y Virginia Díaz, estarán en las finales. Las dos remesas de remeros lograron uno de los tres puestos de acceso para sacar el billete a la prueba que disputarán mañana, los chicos a las 2:18 horas y las chicas a las 2:30 horas (huso peninsular español). Ya saben, ajusten sus despertadores.
Menos fortuna tuvieron los jovencísimos Manel Balastegui y Caetano Horta, que se quedaron sin ese tique en doble scull ligero al ser quintos en su semifinal.
Canalejo y García
Venían de la repesca, con algo más de cansancio físico, pero con buenas sensaciones. En ella habían sido los más rápidos. Confirmaron las sensaciones cuando tocaba. Fueron en segunda posición durante buena parte de la prueba y al final sólo fueron rebasados por la pareja danesa. Australia, cuarta, no anduvo cerca de poner en aprietos a los españoles, quedando a algo más de tres segundos.
Fueron terceros, por detrás de Rumanía y Dinamarca. Con un tiempo de 6:16.25, a 2.74 de los mejores, lo consiguieron. Además de los tres países mencionados en la lucha por las medallas veremos a Croacia, Serbia y Canadá, clasificados en la segunda semifinal.
En sus tomas de contactos con el canal, el Sea Forest, estos dos andaluces, uno del Sevilla y otro del Betis, dejaban caer que, pese a la virulencia del mismo, las sensaciones eran positivas. Hicieron burbuja para que el coronavirus no les rompiera el sueño y este jueves van a poder luchar por llevar a España una medalla.
Cid y Díaz
En su caso, remontada espectacular. Se sabía que su fuerte no eran las salidas y que siempre van de menos a más. Sea por el poder mental que ejerce el poder verse más cerca de una medalla o por la épica que imprime un guión así, alegrón de los grandes. Porque estaban las sextas en el primer paso y no precisamente cerca. Nueva Zelanda puso el turbo, algo que también se podía dar por sentado, y no falló.
Las paladas eran dentelladas a la ventaja de todas, incluso de las líderes y de unas rusas que vieron en peligro su segundo puesto pese a la consistencia mostrada. Cid y Díaz pasaron a Italia, Rumanía y Estados Unidos para meterse en la final. El récord mundial de las oceánicas espoleó a todas y España acabó con un gran 6:50.63.
Cid ya contaba con experiencia junto a Anna Boada. Fue hace un par de temporadas, ya justo para unos Juegos que se iban a disputar en 2020, cuando llegó Díaz para ocupar ese lugar. Y vaya forma de adaptarse. Este año ya han sido bronce europeo y se han ganado un oro en la Copa del Mundo, por lo que eran y son opción.
Doble 'scull' ligero
Se puso mucho más cara la final A para los participantes españoles en el doble scull ligero en categoría masculina, Manel Balastegui y Caetano Horta, y se quedaron fuera. Pese al buen rendimiento les tocará la final B y no poder luchar por las medallas. Se clasificaban tres en su serie para la eliminatoria decisiva y pasaron terceros por el primer punto de referencia, pero Bélgica remontó sobremanera y Ucrania también terminó pasándoles. Buen papel con 6:15.49.
Irlanda, con Fintan McCarthy y Paul O'Donovan, dio tal recital que se cargó la mejor marca mundial en esta especialidad, el 6:05.36 de Sudáfrica en 2014, superándolo por sólo tres centésimas y consiguiendo también el récord olímpico que unos minutos antes se había asegurado la pareja de Alemania.