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ROMA - REAL SOCIEDAD | SPINAZZOLA

Spinazzola: “Vialli te llegaba a la cabeza, al corazón y al alma”

El lateral de la Roma habla con As antes de medirse con la Real. Los obstáculos de su carrera, el título de Italia en la Euro, Cristiano, Dybala y, por supuesto, un análisis del equipo txuri-urdin.

Spinazzola.
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Leonardo Spinazzola (Foligno, Italia, 29 años) es uno de esos casos en los que sí el fútbol debe algo. En 2018, una lesión en el ligamento cruzado de la rodilla derecha lentificó su evolución y lo peor vino en 2021. Mientras estaba siendo uno de los hombres clave de la Italia campeona de Europa, la ruptura en el tendón de Aquiles izquierdo le dejó sin semifinal, final y lejos del verde durante casi todo el curso 2021/22. Este año el lateral ha vuelto a mostrar sus virtudes: ya ha sido decisivo para remontar contra el Salzburg y, ahora, apunta a la Real. El italiano habló con AS de su momento y de sus últimos dos años.

Leonardo, por fin está de vuelta a su nivel. ¿Se siente bien como antes de la lesión?

Eso no lo sé, necesito tiempo. Es todavía pronto, estoy recuperando ritmo y estoy muy feliz de haber vuelto a saber empujar con intensidad durante todos los 90 minutos.

Ha sido un periplo largo.

Sí. A mitad del camino, veía que no mejoraba y todo era negro. Desde enero de este año, por fin, noté que podía regresar a mis niveles.

La mala suerte le ha parado en su mejor momento. Durante la Eurocopa, hasta empezó a sonar por el Madrid…

Ver tu nombre relacionado con clubes tan importantes solo te ilusiona, pero en aquel momento estaba centrado en la Euro. Luego, pasó lo que pasó.

Dijo que por Mou iría a la guerra.

El míster me transmitió confianza y tranquilidad día tras día. Vivió mis momentos de ilusión y también cuando estaba físicamente en Trigoria, pero mentalmente en otro planeta. Sabe darle serenidad al grupo, quiere lo mejor; pero se basa en la actitud, no solo en los resultados. Si lo das todo en el campo, él no te dice nada aunque se pierda.

¿Qué Roma se encontrará la Real?

Un equipo con identidad, hambriento, que quiere batirlos y clasificarse. La Europa League es fundamental para nosotros y este año tenemos objetivos importantes, que vivimos partido a partido.

¿Y qué Real Sociedad se espera?

Lo están haciendo bien en la Liga, sabemos que quieren el balón y los analizamos con los vídeos. Con el míster hacemos varias sesiones de eso, antes, durante y después de los entrenamientos. Serán dos partidos durísimos.

Se cruzará con Oyarzabal, al que batieron en la Euro.

Es un gran futbolista, pero no es el único de la Real. Debemos estar unidos en ambas fases, sin fijarnos en los nombres propios.

Será una gran noche europea, y usted, más allá de la Eurocopa, también vivió otra con la Juve, en el 3-0 al Atleti de 2019. Jugó un partido espectacular.

Uno de los recuerdos más bonitos de mi carrera. Era mi primer, y hasta ahora único, partido en la Champions. Y fue perfecto.

Cristiano marcó un hat-trick inolvidable. ¿Qué compañero era?

Lo que se me ha quedado grabado es su humildad. Muchos piensan que no, pero es así y es lo que más me ha impactado, además de lo futbolístico que conoce todo el mundo. Hay un montón de jugadores mucho más creídos y no son ni la mitad de la mitad de Cristiano.

De aquella Juve se volvió a encontrar en Roma con Dybala.

Paulo es un campeón que puede arreglarte un partido en cualquier momento. Un chico positivo, alegre, que nos ha aportado dentro y fuera del verde. Ojalá marque un doblete con la Real.

El argentino fue al Mundial (y volvió campeón), Italia no. ¿Cómo le ha podido pasar a la campeona de Europa?

Son cosas del fútbol. El partido con Macedonia, si Italia lo vuelve a jugar 100 veces, lo gana 99. Este deporte está cambiando, ya no encuentras a selecciones pequeñas con las que ganas cinco o seis a cero. Todos se preparan tácticamente mejor, y te complican las cosas. Ha sido duro, pero vamos a volver.

Mancini está intentando reconstruir la magia de la Eurocopa. ¿Es cierto que sabían que iban a llegar tan lejos?

Sí. En ese grupo espectacular, algo se respiraba en el aire que ni sé explicarte. Notabas que eras capaz de ganar siempre y eso se mantuvo hasta el último penalti de Wembley.

Elemento de aquel grupo fue también el gran Vialli.

Un elemento fundamental. Fue nuestra fortaleza. Hablaba poco, pero cada palabra llegaba a tu cabeza, a tu corazón, a tu alma. Sin él, no habríamos ganado. Antes de cada partido, había un discurso suyo capaz de hacerte reflexionar, de hacerte sentir fuerte y, sobre todo, afortunado. Lo echo y lo echaré de menos. Mucho.

Imagino que tenerle cerca, en los primeros días de la lesión, fue importante.

No solo en los primeros días. Ha estado apoyándome durante todos los meses de mi recuperación. Así era él.

Tras haber levantado una Eurocopa, pudo vivir un título internacional con la Roma. ¿Qué fiesta fue la de la Conference?

Una cosa de locos, inexplicable. Cuando levantamos la Copa, dije ‘mañana en Roma entenderemos lo que hicimos’. Fue algo tan grande que ni pudimos acabar la vuelta con el bus… Me dijeron que ganar en Roma es como ganar 100 veces en otro sitio. Y es cierto.

Ligamento cruzado de la rodilla en 2018, tendón de Aquiles en 2021... ¿Podemos afirmar que lo mejor de su carrera, por fin, arranca hoy?

No, mejor no digamos nada (ríe).