Marcao regresó al lugar del crimen
Cinco meses y medio después de lesionarse ante el City, el central brasileño volvió a jugar, además como titular, precisamente en Mánchester
Marcao volvió a tener minutos con la camiseta del Sevilla en la ciudad en la que hace cinco meses y medio se rompía. Aquel dos de noviembre, en la intrascendente última jornada de la fase de grupos de la Champions en la que el Sevilla visitaba al City sin jugarse nada, Marcao sufrió una lesión muscular que se agravó durante la recuperación y que motivó que no hubiera vuelto a jugar desde entonces.
“Justo es la misma ciudad en la que me lesioné, pude volver y jugar con intensidad los 90 minutos. Son sensaciones muy positivas y tengo que seguir la evolución”, decía Marcao tras el partido. Lo cierto que aquella lesión no tuvo sentido ninguno. O mejor dicho, tuvo todo el sentido del mundo si se tiene en cuenta que a los mandos de las operaciones estaba Sampaoli. Marcao, que no había podido debutar con Lopetegui por diversos problemas, fue usado desde primera hora por el argentino, que lo forzó innecesariamente en un partido sin historia provocando que se perdiera el derbi en primera instancia y casi medio año de competición a posteriori.
Lo curioso es que Marcao regresó con Nianzou como pareja de baile en el centro de la defensa sevillista. Mendilibar alineó de inicio a los “herederos” del vacío que dejaron Diego Carlos y Koundé. Y no se puede decir que estuvieran bien, especialmente Nianzou, que pese a rozar el gol protagonizó acciones que hacen preguntarse muy seriamente qué vieron en él el PSG, el Bayern de Munich y, por supuesto, el Sevilla.
Marcao se apunta a un final de temporada en el que el Sevilla lo va a necesitar y mucho. Tanto en el sueño europeo como en la pesadilla liguera, de la que nadie se olvida que los de Nervión no terminan de despertar.