Castro-Montes, ‘cicerone’ asturiano: “Me encantaría jugar en el Betis... o el Sevilla”
El interior del Unión Saint-Gilloise, de ascendencia española, militó varios años en el Gent: “A los béticos les van a encantar el estadio y la ciudad”.


Alessio Castro-Montes (Tongeren, Bélgica, 1997) juega desde el verano de 2023 en el Union Saint-Gilloise, ese club de la metrópoli de Bruselas que ha sorprendido a Bélgica primero y a toda Europa después colándose por la rendija de la heroicidad, como protagonista de grandes noches continentales en una ya conocida condición de matagigantes. Hijo de un emigrante asturiano en Bélgica, Alessio recaló en Saint-Gilloise después de ser ídolo el Gent (2019-23), en el que es uno de los futbolistas con más partidos a pesar de su edad. Este polivalente futbolista, capaz de actuar en varios puestos de la banda derecha, ejerce de cicerone para el Betis y los béticos en el playoff de esta Conference, ayudado por su hermano Enrico, que habla el español a la perfección.
“El Gent ha tenido muchos problemas este año, sobre todo con las lesiones. Y echó hace poco a su entrenador, así que es una incógnita cómo va a jugar ante el Betis. Pero cuenta con un factor importante: en esta eliminatoria no es el favorito, tiene poco o nada que perder, y eso lo convierte en un equipo peligroso porque cuenta con calidad”, afirma Alessio sobre un club que conoce perfectamente.
“Yo jugué con Danijel (Milicevic), el que ahora es entrenador del club. Allí es un ídolo, como asistente además conocía muy bien a los futbolistas. En algunos partidos de la liga belga no han llenado el estadio, pero estoy seguro que ante el Betis va a haber un ambiente increíble. El Planet Group Arena es un campo de los más bonitos de Bélgica, a los aficionados béticos les va a encantar. Y la ciudad, los que no la hayan visitado aún, también”, añade el ahora jugador del Union Saint-Gilloise.
“Del Betis se conocen muchas cosas aquí en Bélgica, pero el más famoso es Isco. Sobre todo por lo que fue en el Real Madrid”, dice Alessio, al que le encantaría jugar algún día en España. “Es mi sueño, claro. Siempre he sido del Barcelona aunque en mi casa todo el mundo, incluido mi hermano Enrico (que sonríe) son del Real Madrid, porque mi abuela era de Madrid. El segundo equipo de todos es el Sporting de Gijón, por mi padre asturiano. Sería muy bonito poder jugar allí, o en Primera, en un club como el Betis... o como el Sevilla”.
Precisamente en Nervión tiene este futbolista hispano-belga a un gran conocido: Dodi Lukebakio: “Dodi y yo somos del mismo año y compartíamos equipo en las categorías inferiores del Anderlecht. Cuando él se marchó de allí pasé yo al extremo diestro de titular. Nos conocemos muy bien y hablamos algunas veces, también por Instagram. Es un jugador increíble. Tenía problemas con la regularidad, pero parece que los ha superado”.
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