Un muro llamado Tenerife
Los blanquiazules solo han encajado un gol en estos tres partidos del Playoff de ascenso. La solidez defensiva y la de su portero, vuelven a relucir en el tramo decisivo.
El Tenerife definirá su sueño ante su gente. Los de Ramis salieron vivos de Montilivi y por primera vez en su historia podrían ascender a Primera División en el Rodríguez López. Todo lo anterior fue lejos de casa (Extremadura, Leganés y Girona) por lo que sería el broche de oro del Centenario. Y todo gracias, entre otras virtudes, a su solidez defensiva.
Es que los insulares solo han encajado un gol en este tramo decisivo. Fue Eric Curbelo el único que supo vulnerar las manos de un siempre seguro Juan Soriano. Ese tanto, si bien puso algo de emoción en el derbi de Gran Canaria, no fue suficiente para meter en apuros al Tenerife.
“Lo que nos ha traído hasta aquí es esto, desde el primer partido de Liga. Lo hemos dado todo, no dimos nada por perdido y si estamos aquí es por esto”, relató el portero. “Sabemos que ellos tendrán sus oportunidades, pero hicimos un buen trabajo defensivo y ahora nos queda la vuelta, con toda nuestra gente”, añadió.
En Montilivi, cada vez que los rojiblancos lo intentaron o se encontraron con el portero andaluz (quien tuvo al menos dos paradas de mucho mérito) o con la firmeza del entramado defensivo insular que fue un muro para los pupilos de Michel, quienes lo intentaron, pero no encontraron los caminos.
“Sabíamos que nos iban a apretar, que iban a empezar con todo, pero hicimos nuestro plan de partido”, relató tras el choque Víctor Mollejo. “Se ha visto que no hemos estado tan acertados, pero peleamos como jabatos, vamos a todas, defendemos todos juntos y ojalá podamos culminarlo porque hemos creado un gran grupo que merece este premio”, añadió.
El Heliodoro, que estará lleno hasta la bandera para la vuelta, será el que decida qué equipo será de Primera, pero los canarios, con el factor clasificatorio y su solidez defensiva parece que tienen un plus a favor.