La semana fantástica de Romo
Sin partido, tras ocho jornadas sin perder y en la mejor clasificación de la temporada, el técnico racinguista puede centrarse en recuperar a gran parte de los lesionados.
¡Quién se lo iba a decir hace ahora justo dos meses! Justo antes de viajar a Gijón el 11 de septiembre, con cero puntos y cero goles tras las cuatro primeras jornadas, Guillermo Fernández Romo sabía que la tensión se cortaba con un cuchillo a su alrededor y que en El Molinón, ante un Sporting que no conocía la derrota, se jugaba gran parte de sus opciones de continuar en el banquillo racinguista. Y ganó. Y siguió siendo entrenador del Racing. Ahora, a diferencia de aquella semana de alta tensión, Romo vive su semana más plácida de la temporada. Sin partido el fin de semana, presumiendo de ser el equipo que más jornadas acumula sin conocer la derrota, ocho, con la mejor clasificación desde que comenzó la liga y viendo por fin como se le aligera el panorama de bajas, cuando llegó a acumular hasta siete hace apenas tres partidos. Hasta el 20 de noviembre, cuando llegará el Burgos a El Sardinero, el Racing se puede tomar la vida con calma.
En el entrenamiento de esta tarde, el primero de la semana, no han participado los que todavía tienen molestias físicas tras el partido de Andorra, Pombo, Arturo, Satrústegui e Íñigo y tampoco Juergen Elitim, de los lesionados el que más lento va en su proceso de rehabilitación. Los otros tres que llevan semanas de baja, Sekou Gassama, Cedric y Mantilla han trabajado con el recuperador, sin mezclarse todavía con el grupo. Unai Medina y Matheus Aias, que jugaron unos minutos en Andorra, ya entrenan al mismo nivel de exigencia que sus compañeros y estas dos semanas les van a servir para ponerse en forma y poder competir por la titularidad frente al Burgos.
La sesión de esta tarde ha sido escasa de efectivos, con 17 jugadores de la primer plantilla, más Dalisson, del equipo filial, y ligera. Apenas una hora sobre el césped y más para desentumecer músculos y mantener la maquinaria en marcha que buscando cualquier tipo de objetivo físico o táctico, como es lógico. A 12 días del próximo partido, sencillamente, no tocaba otra cosa. El plan semanal de Romo pasa por una sesión diaria hasta el viernes, descanso el sábado y el domingo para toda su plantilla (mientras el resto de los equipo de Segunda, salvo el Villarreal B, disputan la primera ronda de Copa del Rey), y vuelta a los entrenamientos el lunes 14 de noviembre. Ahí sí ya tocará empezar a preparar el duelo con el Burgos en El Sardinero del 20 de noviembre. Para ese día, por cierto, estará ya terminada la renovación de las luces de El Sardinero.
