Héctor Sánchez cuelga las botas
Natural de Fuerteventura, es de los pocos jugadores que ascendió con el Tenerife a Primera División en 2009 que seguía en activo.
La vida del futbolista es corta. Aunque muchos la estiran lo máximo posible, llega un momento que deciden colgar las botas. Esa difícil decisión le tocó tomar a Héctor Sánchez Cabrera (Puerto del Rosario, Fuerteventura, 1985), de los pocos jugadores que aún estaban en activo de aquel Tenerife que ascendió a Primera División en 2009.
“GRACIAS FÚTBOL”. Así, en mayúsculas y con el emoticono de un balón de fútbol comenzó el anuncio de su retirada en las redes sociales. “Después de 22 años fuera de casa, es hora de dar un paso a un lado y agradecer TODO lo que me has dado. Estaría escribiendo todo el día pero seré breve. Agradecer a Todas las personas que hicieron posible cumplir el sueño que todo niño quiere, que es ser Futbolista Profesional. Me quedo con Todos los buenos momentos vividos que me ha dado el Futbol. GRACIAS!”.
El lateral izquierdo debutó con la camiseta blanquiazul con 19 años y de la mano de José Antonio Barrios en mayo de 2005, pero fue con José Luis Oltra con quien logró cierta continuidad. Si bien tuvo una dura competencia con Rafa Clavero, el majorero participó en 21 partidos en la histórica campaña que llevó a los tinerfeños a su último ascenso a Primera.
Se trataba de un defensa zurdo físicamente muy potente y que se prodigaba mucho al ataque. En la mencionada temporada del ascenso no pudo terminarla cómo le hubiese gustado por una lesión que le condicionó los últimos meses de competición. Ya en la máxima categoría sumó 11 encuentros, todos como titular (entre ellos el que se jugó en el Camp Nou).
Después de más de un lustro en el club y 75 partidos oficiales con el primer equipo, decidió marcharse en busca de nuevos retos. Recaló en el Villarreal B, pero con poco protagonismo aceptó una propuesta del Videoton húngaro donde estuvo dos temporadas.
De nuevo en España pasó por las filas de La Roda, Palencia, Amorebieta y ya lo últimos años decidió jugar en diferentes equipos de su Fuerteventura natal participando del Grupo Canario de la Tercera División. Ahora, con su retirada solo quedan tres sobrevivientes a aquel recordado equipo de Otra: Ezequiel Luna, Ángel Rodríguez y Cristo Martín.