El VAR desquicia al Deportivo
Enfado en el club coruñés, que ya estaba indignado recientemente con el VAR en Castellón y A Malata, con los dos penaltis revisados y el ‘olvido’ con la posible roja a Butzke.
En el Deportivo no había sentado nada bien la pasada semana la designación arbitral para el partido de Anduva, en gran parte por las recientes protestas al CTA con varias polémicas. Los elegidos fueron Muresan Muresan, que regresaba tras su paso por la ‘nevera’, y un Ais Reig en el VAR de nefasto recuerdo para los blanquiazules por su arbitraje en 2018 en El Arcángel con la triple expulsión de Pablo Marí, Borja Valle y Natxo González. El resquemor preventivo se transformó en enfado al término del encuentro ante el Mirandés (2-2) por varios motivos.
Aunque las declaraciones post partido de Gilsanz y Soriano fueron suaves, en el Depor se sigue sin entender lo sucedido. Los dos penaltis pitados fueron jugadas que Muresan Muresan vio perfectamente y que no sancionó, pero que tuvo que revisar ante la llamada desde el VAR de Ais Reig. La primera por una posible patada de Pablo Martínez, la segunda una mano del central francés tras despejar con el pie y sin que el balón rebotado fuese a portería. El comentario parcial de Ais Reig en los audios ha sentado fatal en A Coruña: “Vas a ver un gesto deliberado de la mano hacia el balón”, le dijo el alicantino a Muresan Muresan.
El criterio para llamar al VAR enfada al Depor por el diferente rasero con la jugada que protagonizó Butzke en una entrada sobre Pablo Vázquez por encima del tobillo susceptible de roja. De nuevo, Muresan Muresan la vio y sacó tarjeta amarilla. La diferencia con los dos penaltis es que en esta ocasión el VAR no le llamó para revisar la jugada, con lo que la posible expulsión del delantero jabato en el minuto 76 en el limbo.
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Todas estas polémicas desquician a un Deportivo que lleva un mes, y una temporada, totalmente peleado con el VAR. La última fue hace sólo dos jornadas con el gol en propia puerta de Yoel en A Malata cuando el portero estaba solo y no hubo ningún contacto ni nada más en el área. La jugada no se revisó. A ello se unieron tres entradas susceptibles de roja, pero tampoco ninguna se revisó. El 0-1 final restó el impacto de las decisiones, pero no al enfado. Tampoco en la jornada 31ª en Castellón (2-2) el colegiado no tuvo a bien revisar la falta previa sobre Mella en la jugada previa al 1-1. El club solicitó el audio y el CTA lo facilitó. Milla Alvendiz avisó a Lax Franco de “un posible contacto” en el robo de balón sobre Mella. La respuesta del árbitro murciano sigue sin entenderse en A Coruña: “Fue gol legal, seguimos”.
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