‘El niño que soñó con pisar La Rosaleda’ reúne a las viejas glorias del Málaga
La presentación del libro ‘El niño que soñó con pisar La Rosaleda’, escrito por Javier Souvirón, congregó en La Rosaleda a malaguistas de ayer, hoy y siempre.
‘El niño que soñó con pisar La Rosaleda’ es un libro escrito por Javier Souvirón, carismático y eficaz masajista, ATS, fisioterapeuta, recuperado del Málaga… ¡lo que fuera necesario! durante tres décadas. Ha sido presentado en la sala de prensa Juan Cortés de La Rosaleda. Se trata de un viaje por momentos brillantes (y otros menos buenos) malaguistas en sus dos denominaciones como Club Deportivo Málaga y Málaga Club de Fútbol.
A través de un vídeo muchos antiguos jugadores y técnicos arroparon al autor. Goicoechea, Azuaga, Canillas, Mikel Roteta, Sandro, Dely Valdés, Darío Silva, Txomin Larrainzar o José Luis Gilabert, recordado preparador físico en la época de Joaquín Peiró. Relatos de vivencias, historias, anécdotas. “Muchos de aquí somos ese niño que quiso pisar La Rosaleda” destacó el coordinador de la Fundación MCF Lucas Rodríguez
Andrés García Baena, de ediciones Algorfa, expresó su emoción “por este ambiente tan especial que estamos viviendo”. Dio las gracias al escritor “por confiar en nosotros”. Recordó que estuvo en Angola “ayudando a la gente” y que es además “experto en ciclismo”. También destacó la relación entre literatura y fútbol. Y refirió una frase de Julio García Llamazares: “El fútbol es una metáfora de la vida”.
Javier Souvirón, artífice de la obra, mostró su emoción. “Debo dar las gracias al Málaga por el esfuerzo que ha realizado para presentar este libro. Son mis vivencias al servicio del Málaga. Escribir este libro ha sido una necesidad terapéutica. Desde que dejé el club me alejé de todo, de este ambiente. Un día viendo un partido en el hospital me di cuenta, viendo un partido de futbol de la Selección, me di cuenta de que solo conocía a Sergio Ramos. Por eso me planteé este libro animado por mi amigo Dani Marín”.
Souvirón habla en su trabajo de jugadores, técnicos. “Antonio Benítez me enseñó lo que era el fútbol por dentro y los códigos internos de un vestuario. También destaco a don Joaquín Peiró, el único técnico que ha ganado un título con el Málaga” Prosigue Souvirón. “Están los indispensables, los que no salen en la foto. Me siento muy orgulloso de haber pertenecido a este club. Deseo que el club consiga el objetivo que por su trabajo merece”. Emocionadas palabras coreadas por un largo y sincero aplauso.
El periodista Dani Marín, autor del prólogo expuso lo siguiente. “Agradezco al club a la fundación y a ediciones Algorfa y a Mariano Pozo (fotógrafo de As) por habernos cedido fotos. Gracias a Javier por permitirme hacer este viaje, Javi entró en el año 1983. Ha vivido la gloria y el infierno, impagos, la desaparición, la Intertorto… un montaña rusa de emociones condensada en 19 capítulos de este libro. A Javier le define una palabra: bondad. Ha sido voluntario en zonas de guerra. Un masajista es mucho más. Recibe al futbolista con un problema muscular pero también mental. Esa camilla es una alcoba donde se presta lealtad. Es un libro contemporáneo”. Marín definió esta creación como “algo necesario”.
Por último destacó la importancia que tiene la familia en el fútbol. “Para que Pedro Bazán se quedase en el Málaga fue muy importante su mujer”. Hay muchas familias malaguistas unidas por este libro.
Como decíamos, muchos jugadores de ayer y siempre. Rafa, Basti, Bravo, Raúl Iznata, Gerardo, Quino, Antonio Álvarez, el Boquerón Esteban, Fernando Peralta, Movilla o Vicente Valcárce. También Pepe Mel, Manolo Gaspar (director deportivo), José María Muñoz administrador judicial del club…directivos de siempre como José Antonio Ruiz Guerra, Manuel Hernández Navarrete; la futbolista y entrenadora Isa Guerrero, Abdallah Ben Barek, Francisco Martín Aguilar… familias ilustres siempre vinculadas al Málaga como la de Antonio Benítez, el recordado periodista Francisco Cañete, Miguel Zambrana, Juan Carlos Salcedo, el doctor Juan Carlos Pérez Frías quien con humor comentó. “Gracias a este libro recordaré las vivencias que he tenido”. También destacar la presencia del ciclista Luis Ángel Maté, gran amigo de Javier Souvirón, ese eterno niño que soñó con pisar La Rosaleda.