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LAS PALMAS 2 - PONFERRADINA 0

Aprobados y suspensos de Las Palmas: Sandro Ramírez rompió el cántaro

El delantero se reencuentra con el gol en un partido en que se le estaba atragantando a Las Palmas. En el segundo, botó el centro que Adot acabó metiendo en su portería.

Sandro.
Carlos Diaz-Recio

Valles: Tuvo un comienzo lleno de eventos, en el 8′ sufrió una falta de Naím García que le costó una amarilla y un minuto después tuvo que realizar la primera gran acción del partido en la que salvó el 0-1.

Álex Suárez: El partido alrededor de la media hora parecía estancado, y en vistas de la poca presencia ofensiva berciana, el lateral empezó a asomar más el hocico en defensa. Incluso se atrevió con algún tiro a puerta. Fue él quien encontró a Marvin en la jugada que rompería el 0-0.

Coco: El ataque rival pisaba poco pero amenazaba su espalda el rival. En varias ocasiones debió cerrar el pasillo interior entre los centrales y dejar salida por su lateral y cortar situaciones de extremo peligro.

Curbelo: De primeras, el meta Amir parecía buscar en largo a Eric para atacar el primer balón con él y encontrar espacio a su espalda. Eso fue el spoiler de lo que vendría o por lo menos la intención rival. Lo solucionó con solvencia a pesar de la sensación de vértigo en ciertos ataques puntuales. En el descuento casi marca, lo que hubiera partido 150 del canterano.

S. Cardona: Comenzó el encuentro con proyección y presencia ofensiva. Con el paso de los minutos fue diluyéndose, quedando relegada a momentos. Aún así dio algún centro interesante que no encontró destinatario amarillo. Mejoró en defensa en aquellas jugadas puntuales que pueden desequilibrar el marcador.

Mfulu: Apenas se desplegaba en ataque, su foco estaba más en evitar los contragolpes rivales. Algo que desempeñó con maestría.

Loiodice: La Ponferradina se juntaba mucho en la zona de tres cuartos. Durante la primera parte el francés no conseguía enlazar con regularidad con la punta desde el interior. Faltaba constancia que fuera resquebrajando la doble barrera contraria. Se le vio mejor por fuera, cerca de Pejiño. En la segunda parte empezó a aparecer con mayor frecuencia.

Kaptoum: Primera titularidad y se le vió con una tendencia a buscar los pases a la espalda de la defensa. En algunos casos sin mucho acierto, en otras sí, en cualquier caso muy bienintencionadas siempre. Poco a poco fue perdiendo influencia en el juego pero buenas pinceladas.

Pejiño: Aportó filo desde el extremo derecho con diagonales en dirección a la portería con el apoyo de Loiodice y amenaza desde fuera del área. Durante la primera parte el juego estaba más escorado a la banda izquierda y le dejaba como un secundario. Algo que cambió en la segunda mitad con el gaditano como principal estilete hasta su sustitución.

Loren: Aportó mucha brega en la punta del ataque. Provocó un penalti en el 12′ metiendo la puntera a un despistado Amo cuando iba a sacar la pelota. En el momento de levantar la cabeza el central ya había golpeado al delantero. En el lanzamiento de la pena máxima Amir le leyó la intenciones y se lo paró. Asustó en el 53′ desde fuera del área al meta iraní.

Moleiro: Empezó con el turbo activado y la portería rival como punto de destino. No paró de regatear, y a reintentarlo, tantas veces como fuera posible y necesario. Fue la gran amenaza amarilla y la que más animaba la tarde. En la segunda parte jugó más por dentro y el juego lo agradeció.

Entraron desde el banquillo

Sandro: Entró en el 60′ y ocupó el extremo derecho. Totalmente fundamental para desequilibrar el marcador, primero con 1-0, apareciendo en segunda línea para aprovechar un pelota que se quedó suelta después de un despeje de Amo. Cuatro minutos después puso un centro con tanto veneno que Adot lo metió, sin querer, en su portería.

Marc Cardona: Le dio continuidad a la brega de Loren desde la punta. Dio la sensación de que podía encontrar la rendija por la que podría colar el primero de la noche con regates y movimientos.

Marvin Park: Es rara la vez que Marvin no genera al menos una jugada de clarísimo peligro. Ante la Ponferradina no fue la excepción.

Fabio: Saltó al final para dar refresco al centro del campo y lo cumplió.

Óscar Clemente: En los cinco minutos que estuvo en el campo le aportó ganas e intensidad.