Una diferencia elevada al ‘Kubo’
Siete puntos y ocho puestos separan a Real Sociedad y Mallorca en la tabla. La distancia que genera un japonés que desde su llegada a San Sebastián vía Palma no ha parado de crecer
La diferencia entre la Real Sociedad y el Real Mallorca se llama Takefusa y se apellida Kubo. El japonés de oro de nuestra Liga al que en el club bermellón sacaron más rendimiento de márketing que deportivo, pero que desde su llegada a San Sebastián no ha parado de crecer de manera exponencial para generar pingües beneficios, ya en todos los sentidos. Hay más disparidad entre ambos equipos (sigue el partido en directo en AS.com), pero la del atacante nipón es, nunca mejor dicho, elevada al Kubo.
Hasta que la Real Sociedad se cruzó en su camino, el lugar en el que más y mejor había rendido Take Kubo en nuestra liga había sido el Real Mallorca. Allí marcó 4 goles en 36 partidos y llegó a un valor de mercado de 10 millones en su primera etapa en 2019, y después en 2021 hizo dos goles en 31 partidos y acabó con 6 millones de valoración. Nada que ver con su explosión en San Sebastián. Ya la pasada temporada terminó con 9 goles y llegó a jugar 44 partidos. Pero es que el inicio de ésta ha sido estratosférico. Lleva cinco goles en diez partidos y su valor de mercado se ha disparado hasta los 50 millones de euros, siendo el jugador más valioso del club donostiarra con Mikel Merino y el japonés con más valor del mundo junto a Mitoma.
De Mallorca a San Sebastián ha quintuplicado su valor, y nadie duda ya que se ha ganado un sitio para sentarse a la mesa de los cracks de nuestra Liga. Esa es la diferencia entre ambos equipos: Take Kubo. Porque con su versión más superlativa está ayudando a la Real Sociedad alcanzar cotas inimaginables. Al equipo bermellón no le pudo dejar en Primera en su primera etapa, pero sí lo logró en la segunda, aunque fuera con un sufrimiento terrible. Las comparaciones son odiosas.
Seguro que Javier Aguirre recela de aquel Kubo viendo el de ahora, y se preguntará dónde estaba entonces. Aunque puede que también influya lo que rodea al japonés, que no es menor. Ponerle a jugar con Merino, Oyarzabal, Zubimendi, Le Normand, Barrenetxea, Traoré, Zubeldia, Brais Méndez… es garantía de éxito. Y así va la Real, lanzada a por otra campaña exitosa, después de haber perdido hasta sólo los dos partidos que ha jugado en la capital. El equipo bermellón, mientras tanto, sufre sus ausencias.
Jugar sin Maffeo, Darder y Raillo le hace ser menos Mallorca de lo que quiere el ‘Vasco’ Aguirre. Así es más complicado rodear con garantías a Muriqi, a la espera de que el fichaje estrella Larin termine de despertar. Y hablando de refuerzos, la Real tendrá a tres del verano en la enfermería: Odriozola, Tierney y André Silva. Menos mal que está Kubo, que ha marcado sus cinco goles en el Reale Arena, de la arquitecta Izaskun Larzabal, la misma que ha ideado la reforma de Son Moix. En eso no hay diferencias, tampoco en la capacidad de marketing de Kubo. Al Mallorca le abrió unas puertas de las que aún hoy sigue beneficiándose, la Real también empieza a sacar partido de su presencia. La hora del partido tampoco es casualidad, porque Take marca la diferencia, dentro y fuera del campo.
El Reale Arena, campo maldito para los baleares
El Real Mallorca visita un campo que no se le da precisamente bien. El equipo bermellón ha perdido en su ultimas nueve visitas al Reale Arena, sin poder marcar un gol en las seis recientes. Es más, ha perdido contra la Real Sociedad en sus últimos siete partidos. Además, sus últimas cuatro visitas al País Vasco se han salado con derrota. Y por si esto fuera poco, su entrenador, el ‘Vasco’ Aguirre, ha perdido siete de sus últimos nueve partidos que jugado contra el club txuri-urdin.
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