NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

REAL VALLADOLID

Un penalti con aroma a Zorrilla para crecer y empequeñecer

Caro detuvo la última jornada un penalti a Sekou, con quien compartió vestuario en el Real Valladolid, a quien todavía pertenece el punta.

Actualizado a
Caro, portero del Burgos, deteniendo un penalti a Gassama, del Racing.
Nacho Cubero

El fútbol tiene estas cosas, pensaría el domingo todo aquel que vio frente a frente a José Antonio Caro y a Sekou Gassama. Ambos con pasado en el Real Valladolid, de hecho, el delantero todavía aparentemente con futuro, por lo menos con base en su contrato, se vieron las caras en esa suerte suprema del balompié que es un penalti. Los once pasos que les separaban son un mundo en sensaciones a día de hoy y lo fueron, tras el silbatazo del árbitro, en la resolución.

Corría el minuto 41 cuando ‘la pantera’ se perfiló de derechas antes de dar dos pasos para disparar con la izquierda. Pero su excompañero adivinó la trayectoria, se venció a su zurda y, abajo, agrandándose, atajó la bola. Su duende mantuvo así el empate a cero, uno que campeó en el marcador después de la anulación de un gol al Racing y hasta que Curro Sánchez marcó su tercer gol de la temporada, que a la postre otorgaría un nuevo triunfo al Burgos.

De esta manera, ‘Churripi’ alargó el mal fario del atacante, a quien la fortuna no le está acompañando en una nueva cesión. No en vano, apenas ha conseguido ver puerta en una ocasión, frente al Sporting hace más de dos meses. Desde entonces, ha vuelto a sufrir alguna de sus habituales lesiones, que hacían que, precisamente ante Caro, reapareciera después de más de un mes ausente de los terrenos de juego.

Y es que, casi dos años después de firmar como blanquivioleta, Sekou sigue empequeñecido y lejos de ser aquel que acaparó ofertas al vincularse al Real Valladolid por segunda vez, sin encontrar una versión optimizada y sin hallar continuidad, en buena medida, por razones físicas. Si la temporada pasada jugó un partido antes de marcharse cedido al Málaga, esta se repitió el escenario con destino a Santander. Sin embargo, aunque todavía tiene tiempo por delante, el único tanto marcado se hace escaso mirando a un futuro vallisoletano.