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SEVILLA

Un diván para Tecatito

El jugador mexicano ha vuelto por fin a sumar minutos con el Sevilla, pero debe quitarse el temor que le provocó, con lógica, su grave lesión de tobillo.

Actualizado a
Tecatito, junto a Mendilibar.
ANNA SZILAGYIEFE

Titular en el primer encuentro de la pasada Liga ante Osasuna, una grave lesión de tobillo y su posterior recaída provocaron que Jesús Tecatito Corona haya estado casi toda la campaña sin poder ayudar al Sevilla. El mexicano se quedó incluso fuera de las dos listas de Europa League, en vista de que su recuperación estaba siendo lenta y vacilante. Recuperado a priori desde principios de marzo, coger el tono físico y, sobre todo, las sensaciones mentales ha provocado que Tecatito apenas haya sumado unos minutos, y cuando no había mucho en juego para su equipo, durante este final de temporada.

Sampaoli ya avisó de las dudas que tenía el futbolista en el regreso y lo mismo ha ocurrido con Mendilibar. Además del problema físico que supone una grave lesión, la dolencia ha tenido una parte mental, de que el futbolista temiera una nueva recaída. Y Mendilibar lo ha sentido: “Todos queríamos que jugara más. Tengo que agradecerle cómo entrena, la alegría que tiene, en el día a día sonriendo, ha aceptado de muy buen grado cómo está. Todos tenemos ganas de que Tecatito juegue y se ponga bien”.

“Tardé casi nueve meses en volver a jugar. Ha sido un momento de mi vida que nunca imaginé que iba a vivir. Sé que la vida trae cosas difíciles pero nunca como éste. Lo pasé mal, mi familia también. Mi hijo me preguntaba. ‘¿Ya vas a volver?’ y eso no sabes lo que duele. La segunda vez que fui al quirófano, antes de Navidad, otra vez con muletas... Pero ya estamos ahí en la pelea”. Eso dijo el azteca después de volver, con golazo además, en Valladolid.

“Tecatito es uno de los mejores futbolistas con los que he estado. Espero que pueda demostrar su calidad, la gente va a flipar cuando vea lo que puede dar”, afirma Óliver Torres, uno de sus grandes amigos en el vestuario sevillista después de haber coincidido ambos en el Oporto.