“Somos el Atlético de Simeone y sí, jugamos bien al fútbol”
El técnico rojiblanco atiende a AS en Seúl. Llega con Gustavo López, su hombre de confianza. “Es más difícil salir del fango como lo hicimos que ganar una Liga”.
Diego Pablo Simeone (Buenos Aires, Argentina, 1970) llega a la cita con AS cerrándose la sudadera, que en Seúl el aire acondicionado aprieta fuerte. Llega con Gustavo López, su hombre de confianza que se sienta a su derecha, y un té verde. La primera semana de la gira, íntegra en Seúl, ha dado para mucho fútbol, sin tiempo para aburrirse en el lujoso Conrad Hotel. Le gusta lo que ve, le entusiasman Riquelme y Lino y le preocupa el mercado, como cada verano. De todo eso, el pasado y lo que vendrá charla durante más de 45 minutos de entrevista.
¿Qué tal Corea? ¿Pudo ver algo?
Nos damos cuenta de la estructura y el orden para vivir. Conviven millones de personas en una ciudad que no es muy grande. Me sorprende el orden, que respetan el semáforo en rojo incluso aunque no haya ni un coche cerca.
¿Y cómo es el día a día? Al final está lejos de la familia, con un desfase horario complicado, en el hotel…
Hay dos maneras de interpretarlo. Enojarse o buen espacio para convivir, generar grupo, dedicarle horas a nuestro trabajo… Que estos 15 días nos sirvan para generar un hábito. No tenemos entrenamientos con mucha carga, pero los partidos nos llevan a un estímulo de cuatro duelos en dos semanas que nos generarán una puesta a punto cercana a lo que buscamos.
¿Y no se trae series o libros?
No se hace largo. Hay entrenamientos, conferencias de prensa, el jueves y el domingo jugamos… Hay espacios que parecen muertos que aprovechamos con charlas individuales también, para conocer a los nuevos, transmitir ideas para que se enganches. Y sí, alguna serie también, estoy viendo Notre Dame. Siempre me gustan los casos reales.
En este tipo de giras, ¿cómo navega el entrenador entre el ‘esto es bueno para el club’ y el ‘esto es complicado para la preparación’?
Interpretando las necesidades de todos. Ponerse en el lugar del otro es la mejor manera de hacer nuestro trabajo y obviamente generar esa situación que nos sirva a todos. Trabajamos en equipo. Lo ideal sería no moverse, pero en realidad todos se mueven: el City, el Madrid, el Barça… Somos parte de esta situación y lo interpretamos de la mejor manera. Son momentos para generar esta familia, este núcleo fuerte para lo que va a venir.
¿Estos partidos le dan para sacar conclusiones o más o menos tienes el plan claro?
El mayor peligro es el mercado, es lo que juega en contra de toda preparación. Están los representantes, que viven de los cambios de jugadores, sus comisiones y tienen sus ingresos y a veces favorecen así también a los clubes cuando hay una buena salida y hay una necesidad. Nosotros estamos en un lugar complicado, porque todo lo que preparas se puede esfumar. Necesitamos un plan A y un plan B por lo que pueda pasar.
¿La guinda a la plantilla es el 5? ¿Qué tipo de jugador?
Necesitamos un medio para compartir ese lugar con Koke y darle más competencia a esa posición. La temporada es larga, las características de los que tenemos alrededor de Koke no son mediocentros puros. Se fue Kondogbia, a Witsel lo interpretamos más como central aunque puede actuar como medio, pero creemos que vamos a competir mejor con la llegada de otro medio que nos dé jerarquía, personalidad, juego y competencia interna.
¿Hojbjerg puede ser una opción?
Hay nombres con los que el club trabaja para favorecer la situación necesidad-obligación. El club decidirá.
Falta un 5, ¿y qué sobra?
Hemos traído 24 jugadores de campo y tres porteros, hubiéramos sido 26 con Giménez y Molina. Pueden pasar un montón de situaciones hasta el partido contra el Granada. Alguna salida que puede haber y nos quedaremos con 21 o 20 de campo, como siempre hemos hecho.
“Necesitamos un medio para compartir ese lugar con Koke”
¿El 5-3-2 vino para quedarse?
Es lo más parecido al 4-4-2 de toda la vida, solo que el quinto empieza desde atrás y el cuarto del medio retrocede para hacerse quinto y tiene más dificultades contra equipos que te atacan más, con gente muy rápida por fuera, que te empujan a tener duelos por dentro… Con los carrileros al medio, con los centrales al medio… Terminas en 4-4-2 casi siempre, pero empezando desde otro lugar, ese 5-3-2 al que ya ponemos nombre. Al principio decíamos que el equipo jugaba mal porque estábamos con cinco, luego jugábamos con cinco, iba bien y nadie decía nada, ganamos la Liga con cinco…
Uno de los que mejor entiende esto que cuenta es Hermoso.
Para cuando nos toca atacar, Mario tiene unas características diferentes. Azpilicueta como central derecho puede hacerlo también, lo ha hecho en el Chelsea. En el City los laterales vienen al medio, el central Stones pasa a ser medio cuando el equipo ataca… Defiendes con dos si te ataca uno; si hay dos defiendes con tres y así puedes tener uno más en el medio para ganar asociación, para que suban los carrileros. Mario lo hace muy bien y terminamos la temporada con muy buen juego.
Y en ataque, ¿es sencillo trabajar con dos delanteros que no sabes si van a quedarse?
Tenemos que trabajar en consecuencia de los que creemos que se pueden quedar. A partir de ahí, somos 25, hay que elegir, alguno se enojará. Podemos fallar, pero creo estar convencido de quién se va a quedar y quién se va a ir.
¿Entonces cree que se queda Morata?
Depende del club y depende de él. Nosotros, en la interna, tenemos claro quiénes se quedan y quiénes se van.
Morata quizá no aporta esos más de 20 goles para pelear por todo, pero asegura 15…
Es un jugador muy importante para nosotros. Tiene características de delantero de área que no tiene ningún otro. Memphis es el más cercano, pero también le gusta salir a asociarse. Álvaro es profundo, estira el equipo, tiene altura, un gran cabezazo. Es fundamental. Esperemos que siga con nosotros. Ojalá podamos ayudar a superar esa barrera de goles. Ha hecho más goles con nosotros que con la Juventus y eso nos genera entusiasmo. El equipo necesita su juego.
“Morata es fundamental, esperemos que siga con nosotros”
¿Memphis y él pueden jugar juntos?
Lo intentamos con Costa y Morata, también con Costa y Suárez aunque no coincidieron mucho… Se puede intentar. Los partidos son diferentes, en alguna ocasión claro que me gusta una dupla con potencia como ellos, habría que ver cómo rodearlos.
¿Y qué va a pasar con João Félix?
El gran foco es el equipo. Es normal que en la prensa y el si se queda o si se va genere un foco. Ya dije que no hay nadie más importante que el club, pero nadie. Ante eso más claro, imposible.
¿Por qué no ha explotado?
Tiene sus características de juego, dio lo máximo que ha tenido, se ha esforzado para trabajar bien con lo que tiene y lo que le exigíamos. No puedo tener ningún reclamo ante lo que dio porque es lo que pudo dar.
¿Puede João Félix triunfar aún en el Atleti?
Tiene condiciones extraordinarias, lo hemos hablado mil millones de veces. Lo ves y tiene buen cabezazo, buen tiro con la izquierda, con la derecha, buen giro, uno contra uno… ¿Tiempo? No depende de mí, pregunten a él y a su representante.
“¿Si hay tiempo para João? No depende de mí, pregunten a él y a su representante”
En cuestión de números. ¿Si salen los dos, llegará uno?
Puede que venga uno si se van los dos, puede que no se vaya ninguno, que se quede uno… Esperaremos al 31 de agosto. El año pasado tuvimos cinco delanteros ya. Nos adaptaremos.
¿Duele especialmente el caso de Giménez con las lesiones?
Me duele por no tenerlo con nosotros terminó la temporada en un nivel altísimo, solo tuvo una lesión después del Mundial. Ojalá vuelva con el mismo espíritu. Lo queremos, es parte de nuestra familia y lo esperamos porque cuando está bien, tenemos una fortaleza defensiva muy buena.
Me encantan los dos. Tienen un juego que todos los entrenadores buscamos, habilidad potencia, gol, velocidad, rompimiento por fuera, hambre… Son esponjas y ojalá se puedan quedar, pueden jugar en distintas posiciones. Todos los equipos buscan futbolistas así, que rompen, y los tenemos.
“Riquelme y Lino son esponjas, ojalá se puedan quedar”
¿Cómo está el tema Carrasco? ¿Cree que se queda
Siempre soy optimista y pienso lo mejor para el equipo. Yannick nos conoce desde hace mucho, se fue, hizo un esfuerzo para volver, ganamos una Liga con una grandísima temporada suya, siempre ha rendido bien más allá de empezar menos bien y terminar mejor. Está en la edad ideal y ojalá podamos aprovecharlo.
¿Es la pieza más importante del 5-3-2?
Yannick entiende perfectamente esa situación, entendemos que Lino también, trabajaremos con Galán y en el otro lado está Nahuel, también Llorente y Riquelme. Estamos cubiertos… si se queda, claro.
¿Y qué esperas de Griezmann?
Al mejor Griezmann. Tenemos una gran relación, lo quiero como persona y como futbolista, pero quiero que juegue bien. Más allá del afecto, hay una exigencia. Igual que él me exige, nosotros lo exigimos para que siga a este nivel que tiene, donde es ese que hace jugar al equipo, quien maneja los tiempos. Nos da mucho.
¿Cómo de importante fuiste para que se quedara el pasado verano?
¿Cuánto? El más importante para que él esté acá fue siempre él. Supo tener paciencia, supo interpretar todas las situaciones del Barça, del Atleti, del entrenador que tuvo que convivir con esa situación. Todo lo que le está pasando se lo merece. Se fue, a la gente no le gustó cómo se fue, se lo hizo saber, él volvió con humildad para recuperar a esa gente. Tiene humildad y trabajo y así es imposible no recuperar el afecto y el amor. La mejor manera de transmitir pertenencia es con hechos. Antoine va camino de ser el máximo goleador de la historia del Atlético y me pone contento. Muchos dudaban de que pudiera hacerlo.
¿Cómo se entera del plan del minuto 60? ¿Qué pensaste?
Tenía en la cabeza que en esos 30 minutos podría responde de la mejor manera, lo convencimos de que a veces puedes ser más importante en 30 que en 90 y lo fue. Pero claro, cuando empezó a jugar 90, el equipo jugó mejor.
¿Es Griezmann el fichaje del que más orgulloso se siente?
Hay muchos con los que tenemos una identificación muy grande, los Godín, Miranda, Gabi, Filipe, Juanfran, Koke… Muchos chicos dejaron una marca grande y hay una relación de muchos años, mucho trabajo. No es fácil el final, siempre lo hay. Por eso el respeto y el saber cuál es el lugar de cada uno y las necesidades es muy importante. Vivimos mucho de lo emocional y tenemos muchos chicos con los que nos sentimos identificados.
¿Lo considera un amigo?
No, el afecto existe. Mis hijas son muy amigas de sus hijos, mi mujer es muy amiga de la suya, pero también Griezmann es el que más goles ha hecho en estos once años. Hay un afecto en consecuencia de lo que me dio. No me voy a comer con Griezmann, no salimos a tomar una cerveza. Nos une el fútbol.
¿Le gustaría que el Madrid fichara a Mbappé? ¿Mejor que Haaland?
Me encantaría, sería extraordinario para la Liga, para que siga siendo de las mejores. Todos los futbolistas que lleguen a España potencian. El Madrid no tiene problema económico para permitírselo. Seguramente si no es este año, el siguiente estaremos compitiendo contra él.
“¿Mbappé en el Madrid? Me encantaría, sería extraordinario para la Liga”
Ahora que ha visto de cerca a Haaland. ¿Mbappé o él?
Nada que ver, son diferentes. Haaland es un animal del gol, es la perfección en ese 9 que vive de cara a portería. El crecimiento del City es recuperar eso que le exigía su juego. Tuvo que llegar Haaland para confirmar la Champions. A veces no te alcanza solo con jugar bien.
Mbappé haría más difícil de alcanzar al Madrid.
Según como lo mires. Hemos ganado una Liga contra Messi, Iniesta, Alexis, Xavi, Busquets… Ronaldo, Bale, Benzema… Es fútbol, no nombres.
¿Madrid o Barça?
Me encanta cómo ha crecido el Barça con Xavi. No era fácil el momento en el que entró, se veía todo raro, pero le dio una identidad. Siempre se necesitan jugadores con unas características y tuvo la ocasión de que llegaran, tuvo que recurrir a un Lewandoswski, que es lo que buscó el City con Haaland, lo que busca el Madrid con Mbappé. Ganar no es fácil, hay que tener buenos jugadores, pero estos son los que terminan resolviendo. El Madrid, tras años de ser más cuidadoso en las llegadas, ahora se volcó a traer jugadores y siempre eligen bien, sobre todo con chicos como Valverde, Rodrygo, Vinicius que pasaron por la cantera. Con una posibilidad económica importante, se ha centrado en chicos con un futuro enorme, han traído a Bellingham, puede venir Mbappé… El Madrid en esas apuestas trabaja muy bien.
Está en el último año de contrato. ¿Ya le han tanteado para renovar?
No hay ningún apuro. En la última comida con Miguel siempre se toca el tema y más adelante, si él lo cree bueno para el club, empezaremos a conversar. Y si no, tranquilidad, la temporada es larga, a disfrutarla de la mejor manera. No pienso en otra cosa.
¿Fantasea con cómo será su vida después del Atleti?
No porque me alejaría de donde estoy. Es difícil centrarse en lo que me pasaría sin estar acá cuando estoy acá. Lo vivo con ilusión, veo al equipo que recuperó entusiasmo, que encontró una identificación diferente a lo que propusimos otros años, estamos más relacionados con la famosa pelota que gusta y nos reclaman. Claro, somos el Atlético de Simeone y no se ve tan claro pero sí, jugamos bien. El equipo tiene buenas situaciones asociativas, está creciendo, necesitamos mejorar en la intensidad defensiva, en la recuperación del balón. Nos enfocaremos en eso para mejorar. Todo eso me genera adrenalina, atractivo e ilusión.
¿Quizá un tiempo sabático en el futuro?
Vendrá algún día una de mis hijas y me dirá ‘papá, ¿cuándo te quedas algún día en casa?’ Le contestaré ‘¿pero tú estás segura de que me vas a querer en casa?’ No pienso más allá de lo que me toca. Las cosas van sucediendo porque tienen que suceder. Siempre fui de adaptarme rápido a lo que toca vivir.
En aquellas semanas pre-Mundial, ¿sintió que se acababa el ciclo?
Sin duda fue la peor parte de estos 11 años. No pudimos transmitir lo que siempre habíamos podido transmitir. Luego tuvimos la suerte, porque es mucho más difícil lo que hicimos la temporada pasada que salir campeón más allá de que ganamos un título. A nivel laboral, hay muy pocos equipos que al irte tan mal como nos fue en la primera vuelta, con una parte dentro del equipo que estaba espesa, no había claridad, compromiso, no se veía identidad en el juego… Era camino a que se terminaba una etapa. El parón nos vino muy bien. Pudimos respirar, cambiar la mentalidad y la percepción de algunas cosas, volvimos con humildad a aceptar lo que estábamos haciendo mal, no salirnos del que creíamos. Recuperar en la segunda vuelta como lo hicimos tiene más valor que cualquier campeonato, es muy difícil salir de una situación de mierda y lo hicimos con humildad, trabajo y compromiso, el grupo estuvo fuerte y cuando el vestuario está bien es nuestra fuerza. Cuantos más españoles conviven en el vestuario, mejor respuesta tenemos como equipo. Por idiosincrasia. Porque estás en España y la idiosincrasia es española y nos tenemos que adaptar los que no somos de España al sentir de lo que necesita el club.
“Es muy difícil salir de una situación de mierda y lo hicimos con humildad, trabajo y compromiso”
¿Pero de verdad optimista?
Yo soy optimista por naturaleza, ya te dije. No soy tonto, veía igual que ustedes que el equipo jugaba mal, que no tenía identidad, ni compromiso con el esfuerzo, que se partía para jugar, que asociativamente no transmitía seguridad. Pero hay un montón de matices. En ese tramo tuvimos a los centrales casi siempre lesionados, a De Paul le costó entrar a su nivel, Griezmann no podía jugar el tiempo que el equipo lo necesitaba, Molina no era Molina… Todo eso nos pasaba y había que atravesarlo, hay veces que se hace con miedo a no salir y otras confiando en que sí. Recuerdo el partido contra el Villarreal, el segundo de Nahuel, que falla en un gol, lo echan... Fui al hotel a decirle que iba a ser importante para nosotros, que estábamos convencidos de su llegada, que era un momento de mierda, pero que no cambiaba nuestro pensamiento. Luego vino el Molina que vemos, el campeón del mundo, el determinante en ataque que hace goles… El que fichamos de Udinese. Muchos creían que no era el ideal, pero por suerte sí lo era. Acertamos una vez más.
“Tras la expulsión fui al hotel a decirle a Nahuel Molina que iba a ser importante para nosotros”
¿Sintió que se le tenían ganas desde fuera?
Después de once años en un mismo lugar es normal que la gente se pueda aburrir, nuestra misma gente incluso. El periodista de turno que está esperando porque me gusta más otro entrenador y a ver si le puedes pegar un poquito… Es un mundo donde todo se maneja de una manera parecida. Sabemos que hay mucha gente que está esperando que nos vaya no tan bien. Seguimos pensando en que lo que hacemos es con amor e ilusión como el primer día.
¿Por qué se habla tanto del sueldo de Simeone y no de otros entrenadores?
¿Por qué? Porque nadie se pone a valorar lo que le dimos desde el trabajo al club. Si uno se pone a valorar lo que dimos desde el primer día hasta hoy probablemente lo entendería muy fácilmente. Me explico, ¿no?
¿Cuál es la decisión más difícil que ha tenido que tomar como entrenador del Atleti?
Mmm… No me viene una rápido. Todas tienen una complejidad, pero no me viene…
¿Y lo más duro que le ha dicho a un futbolista?
Lo más difícil es cuando hay futbolistas que te dieron todo y ya no vas a contar tanto con ellos, hay que sentarte con ellos y hacer entender que necesitamos seguir compitiendo de la mejor manera, como se empezó con ellos jóvenes y hoy con ellos más grandes necesitamos buscar otra ventana para que el equipo siga en el mismo lugar. Cuando alguien te da todo, no es una situación fácil de enfrentar. Hay algo emocional que se va generando, se fue Godín, Tiago, Gabi, Juanfran, Filipe… Te tienes que sentar con ellos y decir ‘vamos a traer a otro a competir con vos’ y ya van entendiendo ellos que van a jugar menos, que tienen que aportar desde otro lugar. Es complejo porque en ese punto hay que alejar lo emocional de lo laboral, porque los rivales no te esperan.
Ha vuelto el anterior escudo y se posicionó a favor antes del referéndum. ¿Por qué?
El club trabajó de la mejor manera. Al principio entendió que había que cambiar el escudo, con el tiempo se fue dando cuenta de que la gente reclamaba volver al anterior escudo, dio el paso humildemente para ver si esto tenía un porqué y cuando se dieron cuenta de que existía buscaron una confirmación. Finalmente, Enrique y Miguel acompañaron lo que la gente quiere. Me parece un gran gesto del club.
¿Está listo para jugar contra Giuliano? A ver cómo lo tratan tus defensas…
Ya lo tiene claro: un 1-0 en contra, no come ni viene a casa en 20 días. Con 2-1 o 3-1 a favor, lo felicitaré.
¿Sus chicas quieren ser también futbolistas?
Son futboleras, pero tienen 6 y 4 años y todavía están lejos de saber para dónde quieren ir. Lo importante es que sean felices.
Comentó tras la última Liga que recortó la distancia de 18 a 7 y quería recortarla aún más. La última entrevista con AS fue hace dos años, a ver si lo podemos recortar.
Si sucede, sería entonces un grandísimo año del club.