Oroz y Abde, juventud y descaro al servicio de Osasuna
Arrasate se ha encontrado con la irrupción estelar del canterano y la cesión por sorpresa del culé
Osasuna firmó ante el Rayo Vallecano un inicio arrollador e idílico de curso en su estadio logrando el pleno de victorias gracias al tanto de Aimar Oroz y a la estelar jugada de Abde que derivó en el tanto final de Rubén García. Como cada San Fermín, Jagoba Arrasate llamó a los suyos a filas a principio de julio para comenzar a preparar una nueva temporada en la que parecía que los habituales del pasado curso lo pondrían complicado a la hora de dar opciones de entrada en el once a sus compañeros o nuevos integrantes.
Entre los convocados se encontraba Oroz, tímido canterano rojillo del que muchos tenían conocimiento de su enorme calidad y del que varios dudaban de sus condiciones para triunfar al máximo nivel. Su valía quedó patente durante los partidos amistosos en los que tuvo minutos y su nombre fue ganando enteros para formar parte de la primera plantilla.
Tras debutar en Primera como titular ante el Sevilla metiendo el tanto de la victoria, repitió de inicio frente Cádiz, Betis y Rayo Vallecano. Ante el cuadro de la franja ocupó la mediapunta por detrás de un Budimir que no tuvo su día, todo lo contrario que el joven de 20 años. Su incidencia en el juego de Osasuna volvió a ser fundamental, parando el tiempo cuando fue necesario o tratando de sorprender con pases imposibles. Su presencia estuvo en el aire por un golpe sufrido durante la semana, pero el gran momento de forma que vive y las ganas de seguir disfrutando del fútbol llevaron a Arrasate a ponerlo.
En el minuto 54 volvió a levantar el puño para celebrar un nuevo gol. Brasanac, quien recién había ingresado, puso un centro raso desde la línea de fondo para que el de Arazuri girase el cuerpo y su tobillo para golpear de manera sensacional al esférico y así poner el 1-0. “Se te pasan por la cabeza mil cosas que no sabría ni decir. Para un chaval de aquí marcar el 1-0 delante de todo Pamplona es increíble”, afirmó tras el choque. La realidad es que volvió a salir por la puerta grande, algo que su compañero Abde experimentó por primera vez con su nueva camiseta.
El jugador cedido por el Barcelona fue presentado el viernes en El Sadar bajo una gran expectación, un estadio en el que 48 horas más tarde aportaría su grano de arena en el definitivo tanto de la victoria. Fue la guinda del pastel en el que Braulio Vázquez ha trabajado durante este verano y no ha tardado en mostrar sus credenciales. El extremo gozó de 10 minutos para demostrar al conjunto culé que la renovación hasta el año 2026 firmada antes de llegar a Pamplona estaba bien ejecutada. Encaró una vez y la decisión no llegó a buen puerto. En el minuto 90, decidió embestir a sus rivales con velocidad y decisión. Fue una acción brillante y repleta de talento en la que regateó a varios rivales antes de pisar el balón en dos ocasiones y poner a Rubén García el 2-1 en bandeja.
El Sadar volvió a rugir como acostumbra en la celebración. Equipo y afición están más unidos que nunca y los visitantes lo notan. Osasuna se ponía cuarto en la clasificación tras sumar 9/9 puntos posibles ante su gente, algo que no conseguían en Primera desde hace 17 años. Osasuna viajará el fin de semana hasta Almería para intentar llevarse los tres puntos ante un recién ascendido que perdió a Umar Sadiq hace unos días, principal estrella del equipo. Las sensaciones son muy positivas y Arrasate no tocará en exceso su equipo titular con la idea de prorrogar el estado de felicidad que atraviesan.