Mbappé, puerta abierta
El francés dispone de una carta para irse libre en 2024 que puede activar para intentar salir este mismo verano, en un escenario que inquieta en Francia.
El futuro de Mbappé se adentra de nuevo en un terreno de incertidumbre. No ha pasado ni un año desde que sorprendiera con su renovación con el Parque de los Príncipes cuando parecía encaminado a vestir la camiseta madridista y su porvenir vuelve a ser motivo de preocupación en el entorno parisino. Este lunes, tras su brillante actuación en el clásico del fútbol francés, L’Équipe marcaba el paso con un contundente editorial: Renovar a Mbappé, la prioridad. Y es que su continuidad no quedó cerrada con un candado de siete llaves precisamente. El jugador, de 24 años, no quiso comprometerse a largo plazo cuando firmó hasta 2025. Fue un plazo cerrado en falso. Kylian se reservó una opción para poder activar su libertad en el verano de 2024.
En Francia ponen ahora el foco sobre ese as en la manga que se guardó Mbappé. El rotativo deportivo de referencia al otro lado de los Pirineos apremia al PSG para que garantice la presencia del astro de Bondy en ese año adicional, hasta junio de 2025, y evitar un nuevo verano de nervios e inquietud con la gran estrella del fútbol francés.
Si el PSG no cierra ese capítulo de su relación con el jugador, las puertas se le pueden abrir a Mbappé este próximo verano. En el Parque los Príncipes se verían en la misma tesitura que en 2021: aceptar alguna oferta que llegue por el 7 y sacar un rendimiento económico por su adiós o arriesgarse a verlo partir un año más tarde sin dejar un solo euro en las opulentas arcas parisino-qataríes. Entonces arriesgaron. La jugada les salió bien después de haber ignorado el verano anterior las ofertas del Real Madrid, que llegó a poner sobre la mesa 170 millones de euros (más otros diez en variables) por adelantar la libertad del crack parisino.
Entre aquel momento y este hay una diferencia esencial. Hace dos años mantener a Mbappé en las filas del PSG no sólo era una cuestión de orgullo, también era un asunto de Estado, a las puertas del gran proyecto de país de Qatar: el reciente Mundial. Aquello movilizó hasta al presidente Macron. Mbappé ya ha cumplido con ese papel de emblema. Con el récord goleador de Cavani a tiro, pocas cosas le quedan para hacer historia en París más allá de una Champions que, de momento, este año se le ha vuelvo a poner en sánscrito al PSG. El culebrón puede tener esta vez un desenlace bien distino.