Lunin gana la batalla
Ancelotti vira hacia el ucranio y le sale de lujo. Tres paradas de mérito del ucranio al Barça. “Jugará el jueves”, desveló el italiano.
Su mirada gélida y su sobriedad por dentro y por fuera, con ese uniforme negro yashinesco, han dejado el debate sobre la portería del Madrid listo de papeles. Lunin se alza como ganador, Kepa un escalón aún más abajo en su proceso interminable de devaluación y Ancelotti ahora sin opciones a seguir con el casting de porteros. El ucranio aportó todo lo que no se le vio al vasco en el derbi de semifinales. A las manos espectaculares (una a Lewandowski en el 12′ con 2-0) engarzó otras acciones para darle sustancia y cuerpo al caldo: con el pie duro ante Ferran (minuto 27) y una doble intervención para neutralizar a João Félix (80′).
Una actuación destacada en su primer gran partido con título en juego y otro competidor por su puesto. Nunca ha tenido una ronda eliminatoria del tramo final (desde cuartos) de Copa del Rey ni de cualquier tipo en la Champions, y si fue titular en el Mundial de Clubes de 2023 fue por la lesión de Courtois en los días previos a viajar a Marruecos. Lo jugó porque la alternativa eran Luis López y Lucas Cañizares, dos jóvenes castillistas. Ahora ha sido diferente, competía con el portero más caro del planeta y la apuesta de Carletto le salió a ambos, el transalpino y a Lunin, de lujo.
Una confianza que el mismo Ancelotti publicitó antes de la final. Ahí se mojó sin necesidad de agua. Desveló en la previa en Movistar+ que el jueves en el Metropolitano “jugará Lunin”. Estaba decidido. Si el ucranio tenía las pulsaciones disparadas por el reto de tener un Clásico con título en juego, algo imposible de interpretar en su lenguaje corporal, ese capote tuvo que funcionar como tomarse una tila. El Carletto psicólogo a pleno rendimiento. Eso sí, tras la final y con el título en la vitrina, el técnico volvió a dar otra gira de tuerca al asunto: “El domingo en Liga juega Kepa”.
A la altura de los grandes
Lunin impone su frialdad también en el frío dato. Uno de cada dos partidos deja su marco inmaculado (cinco porterías a cero en diez encuentros) y su ratio de goles encajado es excepcional: 0,6 tantos por encuentro. Mejor que el portero de los líderes de la Premier (Alisson, 0,75), la Ligue1 francesa (Donnarumma, 0,90), la Bundesliga (Hradecky, 0,66) y la Liga portuguesa (el exmadridista Adán, 1,02) y sólo por detrás del guardameta del Inter primero en la Serie A italiana, Yan Sommer, con un promedio de medio gol recibido por duelo. Lunin, con el que el Madrid cuenta para la temporada que viene independientemente de lo que decida el ucranio sobre su futuro, ha borrado cualquier duda sobre su valía o no para asumir lo que supone ser portero madridista.
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