VALENCIA
La decepcionante temporada del Valencia de la ‘A’ a la ‘Z’
El conjunto che, pese a lograr la salvación, firma una de las peores campañas de su historia. Esto son algunos nombres propios de un año para olvidar.
La temporada del Valencia ha estado marcada por el sufrimiento extremo. Al final, llegó la permanencia en Primera, pero el curso ha sido para olvidar. El cuadro ché ha firmado el peor año desde 1986. Estos son algunos de los nombres propios ordenados de la ‘A’ a la ‘Z’ de esta 2022-23.
Afición: Lo mejor de la temporada. Mestalla empujó como siempre. La afición se movilizó para estar con el equipo en un momento delicado. Llenó el estadio y viajó en masa fuera de casa.
Baraja: El ‘Pipo’ afrontó el reto más grande de su carrera. Asumió las riendas de un equipo en caída libre. Le costó tomarle el pulso, pero cumplió con el objetivo. Ahora, su continuidad está por negociar.
Corona: El director deportivo queda señalado y en el punto de mira de la afición tras una pésima planificación deportiva, principalmente por no reforzar el equipo en enero como era evidente que hacía falta. El club, pese al coqueteo con el descenso, le ha reforzado.
Diego López: La sensación de la temporada, junto a Javi Guerra y Alberto Marí. Marcó tres goles vitales, ante Madrid, Espanyol y Betis. Se ha ganado la renovación hasta 2026. En breve, será oficial.
Entrenador: Tres tuvo el Valencia esta temporada: Gattuso, Voro y Baraja. Sólo el Pipo fue capaz de hacer reaccionar al equipo. El italiano estuvo 18 partidos y el valenciano, de nuevo un parche, sólo estuvo tres choques al frente del Valencia.
Filial: El Mestalla ha sido la tabla de salvación del Valencia con la irrupción de tres canteranos que la afición recordará para siempre. El equipo de Angulo se quedó a las puertas del ascenso a Primera RFEF y aportó sus mejores hombres al primer equipo. Sobresaliente.
Gayà: El capitán ha sufrido como nadie. Le ha tocado dar la cara en un momento de dificultad extrema. En Sevilla, pidió perdón. El mal año del Valencia a nivel colectivo le ha costado el puesto en la Selección. En lo deportivo, Gayà cumplió, como siempre. Hasta forzó cuando su tobillo le pedía parar.
Hugo Guillamón: Otra víctima de un año para olvidar. El mediocentro fue otro tras el Mundial y desapareció en los planes de Baraja. Perdió protagonismo en el equipo y su rol fue totalmente secundario. Empezó jugando, pero lejos de su mejor versión.
Ilaix: Se esperaba mucho más del mediocentro. Volverá al Leipzig tras pasar por Valencia sin pena ni gloria en esta segunda etapa. Arrancó con fuerza, pero encadenó varias actuaciones decepcionantes que no gustaron nada en Mestalla.
Javi Guerra: El canterano llegó para quedarse. Su gol agónico ante el Valladolid valió más de media salvación. El Valencia le renovó hasta 2027. Representa todos los valores que gustan en el valencianismo.
Kluivert: El neerlandés es de los pocos que aprueba. En su caso, hasta con nota. Terminó la temporada con ocho goles, máximo realizador de la plantilla junto a Lino. Tiene una opción de compra de 15 millones. El Valencia pretende negociar con la Roma aunque parece casi imposible que pueda quedarse.
Lim Go Home: Ha sido un año repleto de protestas. A la grieta deportiva, se le sumó la crispación social contra Peter Lim. El Valencia, con el singapurense a los mandos, va de mal en peor. La afición, soberana, se puso del lado del equipo pero supo encontrar los momentos para alzar la voz.
Mestalla: El Valencia no honró el año del centenario de Mestalla, su casa. El estadio no se llevó casi ninguna alegría en su 100 cumpleaños. Al menos, el equipo le ganó al Madrid el día después de su aniversario.
Nico: El jugador cedido por el Barça cumplió y dejó la sensación de que podría haber brillado mucho más si no se hubiese lesionado. También forzó para ayudar al equipo. Con Baraja recuperó galones en el centro del campo. Jugó los partidos decisivos. Veremos qué papel tiene en su vuelta a Barcelona, porque está abierta la petición de otro año de cesión.
Ñoño: El Valencia pecó en exceso su descarada juventud. Al proyecto, con la media de edad más joven de Primera, le faltó experiencia para escapar de las llamas del descenso mucho antes. La bisoñez fue un lastre, aunque curiosamente al final fueron los ‘niños’ los que tiraron del carro. Ellos demostraron que el carácter no es cosa de la edad.
Oxígeno: Es lo que tomó el Valencia tras empatar en Sevilla, la misma ciudad que le vio lograr un campeonato de Liga y ganar la última final de Copa. La permanencia en Primera supuso una liberación.
Premier League: Podría ser el próximo destino de Mamardashvili, el único que se ha revalorizado esta temporada. El plan del Valencia pasa por traspasarle. El georgiano ha sido el más regular en el Valencia.
Qatar: La disputa del Mundial de Qatar y el parón de la competición no le sentó bien al Valencia. Tras la cita de selecciones, el equipo estuvo 8 jornadas sin ganar, cayó en la Supercopa y en la Copa.
Rino: Gattuso pegó la ‘espantada’ en enero. El entrenador italiano dejó el banquillo en un momento muy complicado. Su Valencia ilusionó al principio, enganchando al público con su estilo, pero poco a poco se fue apagando y desesperando.
Sevilla: Una vez más, el futuro del Valencia se decidió en Sevilla. En la misma tierra donde se ganó una Liga, la Copa del 99 y la última del 2019, el cuadro ché amarró la permanencia en la última jornada.
Toni Lato: El canterano, después de toda una vida en el Valencia y tras más de 100 partidos, acaba contrato sin oferta coherente de renovación. Así que, salvo giro, dejará Mestalla. Se lesionó en un acto de servicio y no pudo jugar la última jornada.
Uruguayo: Edinson Cavani es, sin duda, una de las grandes decepciones. El fichaje estrella del Valencia cerró la temporada con cinco goles y sin ver puerta en todo 2023. Tiene un año más de contrato, pero su continuidad tampoco está clara del todo.
VAR: El Valencia se sintió claramente perjudicado por el VAR. Tras el partido ante el Sevilla, el club explotó. “Nos han robado a cámara lenta”, dijo Javier Solís, director corporativo. Ese día, el club aseguró que 17 decisiones habían ido en su contra hasta ese momento. Hay que decir que tras ese partido, las decisiones polémicas le han beneficiado.
Wolverhampton: El destino de Gonçalo Guedes. La venta del portugués y de Carlos Soler debilitó al Valencia. Guedes se marchó a primeros de agosto tras firmar su mejor temporada, con Bordalás en el banquillo. El conjunto ché acusó en exceso la salida de sus dos estrellas.
Xenofobia: El ‘caso Vinicius’ fue uno de los capítulos más llamativos que vivió el Valencia esta temporada ante el Madrid. Ancelotti tildó de racista a Mestalla y la grada Mario Alberto Kempes fue cerrada durante tres partidos.
Yunus: De más a menos. Terminó de forma amarga el año tras una expulsión infantil en el Villamarín. El norteamericano tuvo un rol secundario con Baraja. Al Valencia le hubiese gustado traspasarle y hacer caja, pero su temporada no ayuda.
Zorrilla: Fue uno de los muchos estadios en los que el Valencia puso la mirada al dejar todo para el final. Al final, el Valladolid ocupó la plaza de descenso que amenazó a cinco equipos más, entre ellos el Valencia.