Fornals reconquista LaLiga

En septiembre de 2015 un chico llamado Pablo Fornals apareció casi de la nada para estrenarse en Primera en un escenario de grandeza como el estadio Santiago Bernabéu. Lo hizo con 19 años y Javi Gracia no dudó en darle la camiseta de titular del Málaga para que desafiara lo imposible ante el Real Madrid. Era también su primera convocatoria. Antes del choque, Pablo miró la lista centrando su vista en el banquillo de su equipo y sin encontrar su nombre. Salía de inicio en su primer día grande en LaLiga. Al término de ese empate, convenció a Isco para tener su camiseta cuándo éste ya era una pieza de oro en el Madrid y lo había sido en el Málaga. “Se lo agradezco mucho”. A partir de ahí, una locura. Desde la llamada de Vicente del Bosque para jugar en la selección española hasta su fichaje por el Villarreal. Más de ocho años después, Fornals volvió a LaLiga dispuesto a marcar las diferencias. No hay deudas pendientes. Pero el chico que se marchó a la Premier ya es un hombre.

Mientras negociaba su llegada al Betis en pasadas semanas, el propio Isco, aquel ídolo que le entregó su camiseta en su estreno en Primera, le mandó mensajes de ánimo para que todo saliera bien. Sólo coincidieron algunos minutos sobre el césped en el estreno de Fornals como verdiblanco ante el Getafe, pero ambos sueñan con estar pronto juntos en el plan de Pellegrini. La lesión del malagueño le da un impulso exprés a la adaptación del castellonense, que debe llenar parte de ese vacío con su fútbol de asociación y su capacidad de llegar al área rival. Sus números ante el Cádiz en su primera titularidad así lo evidencian: líder en ocasiones creadas, en pases realizados y en centros intentados. Y su gol, una genialidad marca de la casa, sirvió para sentenciar un triunfo a domicilio que da a alas a la candidatura europea de los verdiblancos.

Pellegrini encuentra en Fornals aire para su sistema de juego. Es asociativo, llega al área rival y debe aportar a nivel goleador lo que otras piezas de su segunda línea ofensiva no consiguieron en la primera parte de la temporada. El chileno tiene claro que el lugar de Isco debe ser ocupado por Nabil Fekir, pero la capacidad física y el recorrido del francés no se asemejan en prestaciones ahora mismo a las que sí mostraba el malagueño. Por ello la figura de Fornals toma peso en ese fútbol que el técnico quiere de vuelta en Heliópolis. Menos incisivo en el desborde por banda, su posición escorado a la derecha sí tiene cierto paralelismo con ese rol que ejecutaba Sergio Canales en el equipo verdiblanco durante las últimas temporadas.

Fornals regresa a LaLiga con la idea de conquistarla con rendimiento y goles. Quiere dejar una huella que quizás parecía en el olvido cuando trataba de brillar en aquel Villarreal de Javi Calleja. Espera también con los brazos abiertos a un Cédric Bakambu con el que se entendió a las mil maravillas en el cuadro castellonense. Es la gran apuesta de Pellegrini tras este mercado de invierno y ambos deben entregar esa fiabilidad creciente a nivel de pegada. Su reaparición en la Liga ya despierta emociones en el Betis y halagos en el fútbol español. Y romper las expectativas siempre fue una misión posible en la carrera de Fornals.