LAS PALMAS
El monte de las rotaciones
Como en otras ocasiones ante una jornada intersemanal con viaje a la península, García Pimienta le da una vuelta al once.
Pronto se intuyó que los planes de García Pimienta en el Santiago Bernabéu no iban por darle continuidad a los jugadores que más la habían disfrutado en este inicio liguero. Ya en la rueda de prensa previa al choque visualizaba “algún que otro cambio”. Y los hubo. Hasta siete con respecto al partido contra el Granada.
Y es que las raíces de su planteamiento del partido se hunden en aquel encuentro frente a los andaluces y por ello comentaba en la sala de prensa del coliseo blanco: “El problema no era el partido del Celta [del próximo lunes] sino el partido anterior, la gente no estaba recuperada y no era óptimo para los jugadores”, argumentaba el técnico amarillo, recordando los 35 minutos finales con un jugadores menos en el campo. Así pues, tan solo tres jugadores de campo y Valles repitieron. A saber, Julián Araujo quien explicó el estratega catalán que “estaba en condiciones” y Jonathan Viera y Munir a los que sus sustituciones ante los nazaríes a mitad de la segunda parte “hace que hoy pudieran jugar”.
Por tanto, bajo las razones de lo físico, el técnico amarillo introdujo un novedoso once quizá en el escenario menos propicio para una victoria amarilla, según el histórico. Con la salvedad de que: “Si hubiéramos tenido una semana completa, seguramente, hubiese sido otro”. Y gracias a ello, en el césped del Bernabéu se pudo ver los primeros minutos de Eric Curbelo, o novatos, como titulares esta temporada, como Mfulu o Cristian Herrera o los Coco, Javi Muñoz, Sinkgraven, quienes han salido de inicio pero no han estabilizado su plaza. Es decir, un once que no está acostumbrado a estar junto en un partido oficial, con peso y drama.
Además, tiró de memoria el técnico en la conferencia de prensa: “La temporada pasada, los dos partidos que tuvimos entre semana también hicimos movimientos”. Hacía referencia a los encuentros en el Anxo Carro frente al Lugo y ante el Oviedo en el Carlos Tartiere. Choques disputados fuera de casa. Ante los gallegos cambió a seis futbolistas y ante los asturianos a cuatro. Con una diferencia, el primero hubo un viaje previo desde Gran Canaria y en el segundo hubo un desplazamiento desde Gijón.
Asimismo, rebuscando en el baúl hubo otra jornada intersemanal con viaje península-archipiélago que dejó García Pimienta en el tintero en su repaso a vuelapluma que refuerza ese patrón de comportamiento. El encuentro en casa ante el Burgos, un martes, tras la visita a Huesca un sábado. Un partido ante el conjunto de Julián Calero en el que el técnico amarillo introdujo hasta 7 cambios con respecto al enfrentamiento ante los oscenses.
En definitiva, ante una nueva jornada intersemanal y traslado Gran Canaria-Península, García Pimienta tiró a su monte, el de las rotaciones. Una táctica que le había significado, antes del Bernabéu, una victoria, un empate y una derrota previas. Lo que a diferencia de aquellos encuentros, esta vez ni se consiguió arañar al rival.