Duk, esperanza en el desastre
El debut del atacante de Cabo Verde deja señales optimistas en el Leganés. Jugó apenas 20 minutos en los que mostró guiños ofensivos y, sobre todo, mucha actitud ofensiva.
La derrota del Leganés ante el Valencia el pasado domingo (2-0) entró en la categoría de calamidades pepineras. Quizá la mayor de la temporada. Además del resultado (derrota ante un rival directo al que, además, se le da vida por la permanencia y contra el que se pierde el golaveraje), los blanquiazules vieron como Borna Barisic, su nuevo lateral izquierdo, se rompía el cruzado derecho a los siete minutos de juego para decir adiós a la temporada en su estreno como titular.
Una desgracia que se unió a la amarilla para Neyou (décima, no estará ante el Alavés), la lesión de Tapia (habrá que ver su evolución) y la sensación negativa de un equipo perdido en una final de campeonato. Al menos al equipo le quedó la esperanza de Luís Henriques de Barros Lopes. Duk fue la única luz madrileña en Mestalla.
Este delantero diestro, junto con Barisic, el otro refuerzo invernal del Lega en esta recién clausura ventana, debutó en la segunda parte para dejar buenas sensaciones. Lo hizo pegado a la banda izquierda, una de las posiciones en las que este futbolista polivalente puede ejercer. Cierto es que él mismo se define como un delantero centro, pero las circunstancias le han ido volcando a los costados para ejercer de hombre polivalente.
Tres robos y mucha actitud
Y ahí, ejerciendo en el mismo costado que Juan Cruz (poca broma), al que sustituyó en el 73′, dejó poco más de 20 minutos de buen rendimiento. No sólo en cuanto a oportunidades (rozó el gol en una de ellas) sino en cuanto a desempeño y actitud, ambas virtudes clave para un futbolista que pertenezca a un conjunto llamado a la salvación como máximo objetivo.
Esa perseverancia en el esfuerzo dejó como resultado números interesantes, con dos regates satisfactorios de cuatro intentados, ocho pases de diez intentados, 26 toques de balón, un pase clave y, sobre todo, un esfuerzo en la presión que acabó con ocho duelos de diez ganados, tres faltas en contra y tres entradas exitosas. Nada mal para un jugador recién estrenado en Primera.
El resultado de estas estadísticas mezclada con su actitud: una actuación aplaudida (dentro del desastre del Leganés) que invita al optimismo incluso mirando a la desgracia inmediata de la lesión de Barisic. Visto que Borja Jiménez parece haber dejado de contar con Javi Hernández, al que no da ni un minuto desde que fue sustituido frente al Atlético de Madrid al descanso, Duk abre la vía de usar a Juan Cruz (de nuevo) como parche para el lateral zurdo sin que eso merme la opción de tener un extremo que le sirva de apoyo.
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