Bellingham, en todas partes
El inglés hizo ante el Nápoles su gol 15 esta temporada. Nadie más que él en el Madrid ha marcado en sus cuatro primeros partidos de Copa de Europa.
Ya con todas las cartas en la mano, aún durante la gira por EE UU, Ancelotti pensó en buscar un golpe de efecto para contrarrestar la falta de efectivos en ataque. Y apostó por la ‘Solución Bellingham’. El italiano vio en el último gran fichaje un jugador que nadie antes había intuido. Un jugador total. Algo nunca visto desde Di Stéfano. Y como suele suceder con Carletto... acertó.
Para llevar a cabo su plan Ancelotti se vio obligado a cambiar el 4-3-3 que tanto le había dado en el Madrid. Así, con un 4-4-2 en rombo, acercó a Bellingham (20 años) al gol. Y todo empezó a fluir. Con el gol de ayer, el inglés se convirtió en el primer jugador de la historia del Madrid que marca en sus cuatro primeros partidos de Copa de Europa. Son 15 tantos (tres de cabeza, tres con la izquierda, nueve con la derecha) en 16 partidos. A esos 15 goles añade cuatro asistencias, incluida la que dio ayer ante el Nápoles a Joselu tras la cual, además, tuvo un gesto de auténtico capitán resaltando la figura del delantero para que recibiera el cariño del Bernabéu tras una noche aciaga para él.
Ninguna otra leyenda del Madrid resiste la comparación con Bellingham. Ni siquiera Zidane, su ídolo de la infancia del que ha tomado el 5. El inglés, que ayer estrenó un modelo de botas vintage que imitan a las que llevaba su ídolo cuando marcó la volea de Glasgow, ya ha hecho tres goles más que Zizou en sus campañas más goleadora en el Madrid: se quedó en 12 en la 2001-02 y 2002-03.
Una noche mágica.
Una vez más, en el partido ante el Nápoles la grada del Bernabéu rompió a cantar el ‘Hey Jude’. Y Bellingham respondió con un partido glorioso en el que insistió en jugar después de una desafortunada torcedura de tobillo que mantuvo en vilo durante unos minutos a toda la parroquia madridista. Fue un mal gesto cuando ni siquiera estaba el balón de por medio. Pero se rehizo en el descanso.
Luego, en la segunda parte y tras un momento de titubeo, fue de menos a más, hasta completar uno de los mejores partidos desde que llegó al Real Madrid: una gran noche europea que terminó con unos números para enmarcar: Fue el que más pases dio en el último tercio del campo (37), el tercero que más pases totales dio (63), acertó sus cinco pases en largo, creó cuatro ocasiones de gol, disparó dos veces a puerta (el que más en el Madrid) y marcó un gol y asistió en otro, completó tres d ellos cinco regates que intentó, corrió 11 kilómetros... Bellingham está, definitivamente, en todas partes.
“No creo que sea un nueve como tal, pero él (Ancelotti) ve que me divierto y que ahí, puedo aportar mucho al equipo. Yo jugaré donde me pongan”, dijo Bellingham recientemente. Lo fácil para Ancelotti habría sido poner al inglés en la media, como Southgate con Inglaterra o Terzic y Rose en el Borussia. Pero el italiano vio en él algo que antes pasó desapercibido. A un jugador total. Y ahora Bellingham persigue la leyenda.
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