Aires de venganza
Un Barça lanzado ante un Cádiz que se le atraganta. El equipo de Xavi, en plena racha goleadora, ante el de Sergio que aún no ha conseguido marcar.
Con los números en la mano, el partido de esta tarde entre el Cádiz y el Barcelona en el Nuevo Mirandilla (18:30 horas, Movistar LaLiga) no puede parecer más desequilibrado y tener un favorito más claro que el equipo blaugrana (sigue el partido en directo en AS.com).
Los datos son demoledores. El Barcelona reforzado a más no poder no ha perdido, ha encadenado cinco victorias oficiales consecutivas marcando 16 goles y encajando dos (incluyendo Champions). El Cádiz, en cambio, cierra la tabla clasificatoria, cuenta sus partidos por derrotas y ha encajado diez goles sin haber marcado aún a día de hoy ni un tanto. Pero esto es fútbol y encima, en Cádiz. Los locales se aferran a que desde que regresaron a la máxima categoría hace dos años, no han perdido jamás ante el Barcelona, un equipo al que parecen haber tomado la medida.
Obviamente, este dato es un arma de doble filo. Para el Cádiz supone un elemento de motivación, porque si lo han hecho cuatro veces en dos años, nadie les asegura que no puedan volver a hacerlo por quinta vez. Para el Barça, y ahí está el peligro para los de Sergio, es que Xavi se pueda tomar el partido con aires de venganza deportiva.
De hecho, se lo toma y así lo dijo en la sala de prensa en la conferencia previa cuando habló del rival. Xavi aprecia mucho a Sergio y viceversa, pero a la hora de motivar no hay amigos.
En el Barcelona, consciente de que es inmensamente superior a su rival a pesar de los últimos resultados entre ambos equipos, pesará la sombra de la Champions. No tanto el partido del miércoles pasado como el del próximo martes. Espera el Bayern y en consecuencia, jugadores como Koundé, Pedri o Dembélé podrían descansar. Claro que en su lugar aparecerán otros como Piqué, Gavi, Raphinha o Ferran Torres. El que parece que de inicio no descansará será Lewandowski.
En el Cádiz urgen cambios. El inapelable 3-0 de Balaídos podría pasar factura a varios jugadores. Lo que no parece que cambie es el esquema, un 4-5-1. En defensa podría entrar Fali, por Chust; y en ataque, Lucas, por el lesionado Choco. Alcaraz, uno de los artífices de la permanencia, ha vuelto a la lista tras superar su lesión, pero empezará en el banquillo.