NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

DEPORTIVO

Soriano, del banquillo a líder del Deportivo en ocho meses

Mario Soriano acabó la pasada liga como un tiro y ha empezado esta con un doblete salvador. A sus 20 años empieza a sumar el gol a su talento creativo.

Mario Soriano, en el momento de marcar el 2-1 ante la Balona.
Jesús Sancho

El 31 de agosto de 2021, en el último día del mercado de verano, Mario Soriano aterrizó en A Coruña. El mediapunta madrileño llegaba al Deportivo procedente del Atlético de Madrid sobre la campana para cubrir la última ficha sub-23 que quedaba libre en aquel momento. Su fichaje levantó cierta polémica por su juventud (19 años) y por llegar cedido sin opción de compra. Se vio como un tapón a la prometedora cantera deportivista con el ‘peligro’ de formar a un futbolista para otro club.

Sus comienzos en el equipo coruñés tampoco fueron fáciles, con un rol muy secundario. No fue titular por primera vez hasta la quinta jornada ante Unionistas. A la siguiente repitió frente a la SD Logroñés, pero luego no volvió a un once hasta la jornada 18ª (Talavera). Ese partido, el primero del mes de enero, fue un punto de inflexión. Así, pasó de jugar cuatro partidos como titular en la primera vuelta a 15 en la segunda, cambiando su papel de secundario a intocable.

La explosión

La recta final de temporada fue de dudas para un Deportivo que vio como se escaba el ascenso directo. En ese bajón emergió la figura de Soriano para ser el mejor futbolista del equipo en las últimas jornadas y ganarse a una afición que empezó de uñas. Un crecimiento que llegó a su cénit en el playoff. Suplente ante el Linares, entró para desatascar el partido y marcar un gol (4-0). En la final ante el Albacete, abrió la cuenta y lideró el equipo hasta que las fuerzas se lo permitieron (minuto 68′), pero no fue suficiente para el ascenso.

Una apuesta recíproca

El palo para el Deportivo de no conseguir el ascenso también era una losa para lograr la continuidad de un Soriano que debía regresar al Atlético tras su cesión. La indudable apuesta de Borja Jiménez por el jugador tuvo continuidad en la secretaria técnica, que se volcó para lograr su fichaje. Desde la otra orilla llegaban la misma respuesta. Mario no paró d mandar mensajes en las redes de su voluntad por seguir en el Deportivo, al mismo tiempo que rechazaba ofertas de superior categoría para seguir en un club en el que había encontrado su sitio.

Contrato largo y el ‘10 a la espalda

Lo que podía ser el culebrón del verano, se solucionó mucho antes de lo esperado. Después de un error en la web del club al anunciar su fichaje el 17 de julio, la operación fue oficial dos días después. El Depor anunció un contrato por dos años, pero con opciones futuras que fácilmente pueden llegar a los cuatro. El Atlético, por su parte, se guardó un porcentaje sobre un futuro traspaso. Una firme apuesta refrendada con otro gesto del club blanquiazul, que no tardó en revelar que el joven madrileño llevaría el ‘10′ a sus espaldas.

Figura en el debut ante la Balona

La importancia de Soriano en el Depor quedó patente durante el verano y en el debut ante la Balona. En la pretemporada Borja puso en marcha un cambio de dibujo, pasando del 4-3-3 al 4-2-3-1. Una de las consecuencias fue que Mario, que había jugado en su primer año escorado en banda, pasase a su zona natural: la mediapunta. Una demarcación que multiplica su importancia en el juego ofensivo y le acerca al área. El resultado ha tardado un suspiro en llegar, liderando al equipo y firmando su primer doblete como blanquiazul para remontar este pasado sábado ante el Linense (2-1). Dos goles de oro, el segundo de ellos de pura magia, para que el Depor sumase sus tres primeros puntos.