Manuel Mosquera, toda una bestia negra para ‘su’ Deportivo
El técnico del Córdoba, con pasado blanquiazul, nunca perdió con el Depor. Un empate y tres triunfos, uno clave para el descenso coruñés en 2020.
Córdoba y Deportivo se enfrentan en El Arcángel en un partido vital para las aspiraciones de ambos equipos. El calendario ha querido que en el banquillo blanquiverde esté un reconocido deportivista: Manuel Mosquera. Coruñés de nacimiento, se hizo cargo del Córdoba hace dos jornadas, busca su primera victoria y el domingo se las verá con el club de su vida junto al Extremadura. Manuel debutó con el Deportivo como jugador en Segunda allá por el año 1989, como entrenador dirigió dos temporadas a su filial, el recién ascendido a Segunda RFEF Fabril, y después trabajó en la dirección deportiva del club herculino.
Toda esa vinculación no evita que Manuel sea una auténtica bestia negra para el Deportivo, con el que jamás perdió. De hecho, sus estadísticas son muy favorables con tres victorias en Segunda al frente del Extremadura y un empate con el Talavera (1-1) la pasada temporada, adonde llegó, como a Córdoba, con la liga ya empezada. En la campaña 2018-2019, en la categoría de plata, se impuso a los blanquiazules en Riazor (1-2) y la campaña siguiente repitió victoria en la jornada 16ª en el Francisco de la Hera (2-0). El año pasado también visitó Riazor con el Extremadura, pero el equipo de Almendralejo hizo huelga poco antes de su desaparición y se le dio el partido por perdido (3-0).
Golpe mortal con el Extremadura en Riazor
El mayor roto que le hizo Manuel al Deportivo tuvo lugar en la jornada 40ª de la temporada 2019-2020 en Segunda. Los coruñeses, con Fernando Vázquez en el banquillo, recibían al Extremadura en Riazor con la posibilidad de dejar casi sentenciada la permanencia ante un rival que acababa de descender y con una convocatoria de circunstancias plagada de bajas. Los de Almendralejo se impusieron 2-3 con un doblete de otro exdeportivista, Óscar Pinchi. Después de aquello llegó una nueva derrota ante el Mirandés (1-0) y la traca final con el caso Fuenlabrada. El Depor cayó a Segunda B con 51 puntos, la mayor puntuación de la historia empatado con la Ponferradina, que tenía el golaverage a favor.