15 días de silencio en el Deportivo
Han pasado ya dos semanas desde que Couceiro hablase tras el fiasco ante el Albacete y parte del deportivismo demanda balance del curso, líneas del nuevo proyecto, abonos...
Han pasado dos semanas ya desde que el Albacete le asestara un golpe durísimo a Riazor. El ascenso frustrado supuso un batacazo del que el Deportivo todavía trata de levantarse. 15 días ya desde que Antonio Couceiro saliese a hablar inmediatamente tras el partido. Un breve discurso que ha dado paso a un periodo de absoluto silencio.
Esa fue la única comparecencia pública del Depor a nivel institucional. Ninguna manifestación más ha habido desde entonces. Ni para hacer balance de la temporada, que de forma definitiva termina en cuatro días, ni tampoco para explicar las líneas maestras del, aunque continuista, nuevo proyecto. El absoluto respaldo de Abanca, confirmado por el propio presidente, y los fichajes de Gorka Santamaría y Víctor Narro ha sido la poca información oficial que ha salido de la Plaza de Pontevedra. También una nota a pie de página en el anuncio del delantero vasco avisando de que Borja Jiménez se mantendría al frente del banquillo.
El deportivismo seguirá incondicional apoyando a su equipo, pero buena parte de la afición está deseando escuchar un análisis interno sobre el curso. También se reclama al menos un anticipo de lo que será la nueva campaña de abonos, que no arrancará hasta julio. O una valoración sobre el nuevo grupo de Primera RFEF, con desplazamientos más complicados para el club e inasumibles en muchos casos para la hinchada.
El futuro del Depor Abanca y el Fabril
Pero los socios no sólo están interesados en conocer la autoevaluación del primer equipo masculino. Porque este año la temporada del Depor Abanca también ha sido convulsa. Una gran primera vuelta y soñar con el ascenso dio paso al conflicto con Miguel Llorente, apartado e investigado por el canal ético. Se restituyó al técnico, se logró la permanencia y ambas partes separaron sus caminos. Tampoco nadie ha dado la versión del club y todavía está pendiente el nombramiento de la nueva entrenadora, que salvo giro inesperado será Irene Ferreras.
Y, por supuesto, los seguidores también quieren saber en qué situación está el Fabril. La explosión de la generación de oro juvenil ha disparado el interés en la cantera y el filial ha sido el siguiente escalón para la mayoría de campeones. De la mano de Gilsanz lograron clasificarse para el playoff de ascenso, pero se atisba una remodelación de la plantilla con la salida de figuras importantes como las de Juan Rodríguez o Mario Domínguez.