Real Sociedad
Karrikaburu brilla en el debut de Kubo con la Real
Golazo de chilena del ‘Panzer de Elizondo’ para que el equipo de Imanol empate en casa del Monchengladbach. Interesante puesta en escena del japonés en la segunda parte
Jon Karrikaburu hizo sombra a Take Kubo en su debut con la camiseta de la Real Sociedad en partido oficial. El estreno del japonés con los txuri-urdin se cerró con un empate en casa del Borussia Monchengladbach que firmó el ‘Panzer de Elizondo’ con una chilena sencillamente maravillosa, una de esas acciones que solo los grandes delanteros de área son capaces de protagonizar. Servía para empatar el gol de penalti más que riguroso que filo de la primera de los alemanes. En medio del debate en el entorno txuri-urdin por si hace falta o no redondear el activo verano en el mercado de fichajes con la contestación de un ‘9′ que ofrezca más pólvora a Imanol, Karrikaburu está opositando a ese puesto que parece vacante con goles y buenos partidos en verano. La realidad es que sólo él pude callar ese debate y también apagar las voces que dentro del club puedan aconsejar al final del mercado fichar otro delantero. De momento, se está ganando a pulso las oportunidades y está mereciendo un voto de confianza. Y es de casa, algo que debería ser un plus. El navarro casi deja en un segundo plano a Kubo, que también destacó con una buena puesta en escena, una más que aceptable declaración de intenciones de lo que puede ofrecer en la Real, asistiendo y casi marcando. Habría sido el estreno redondo, pero en boca de gol no pudo debutar a lo grande. La gloria se le escapó a la primera, pero quizá no era el día. Mejor que la deje para cuando haya algo de verdad en juego.
Imanol Alguacil dispuso un once inicial de garantías, que bien podrá ser el esquilo que empiece la liga en el Nuevo Mirandilla contra el Cádiz. Con algún matiz, claro. Que hay algún jugador tocado en este momento de la pretemporada. Pero lo cierto es que el oriotarra se tomó muy en serio la prueba de Alemania contra el Borussia Monchengladbach. Lo demostró con el once que sacó, juntando por primera vez a Illarramendi, Merino, Silva y Brais Méndez, y dejando la responsabilidad atacante a Mohamed Ali Cho y Alexander Isak, titular por primera vez este verano y que formó una interesante dupla ofensiva con el joven extremo francés. Entre ambos prometen potencia, velocidad y dinamismo en el ataque txuri-urdin.
A diferencia del primer amistoso contra el Toulouse, el oriotarra optó por el sistema con el que acabó la temporada pasada con muy buenos resultados, ese 4-4-2 en rombo juntando en la medular mucha magia y poniendo dos balas con mucho movimiento en punta de lanza. La prueba no salió del todo mal, salvo que la Real volvió a adolecer de lo que le faltó en gran parte del curso anterior: el gol. Alexander Isak volvió a gozar de ocasiones que un delantero que quiere valer 90 millones (es su cláusula en la Real) no puede perdonar, especialmente en la oportunidad del fantástico pase en largo que le sirvió Pacheco desde la defensa. El central de Elizondo ha vuelto de vacaciones dispuesto a dar un paso adelante y confirmar las sospechas que llevan tiempo alimentando en Zubieta de defensa con muchísimo futuro. Estaba la Real teniendo las mejores ocasiones en un partido muy igualado, jugado de poder a poder, hasta que al filo del descanso el colegiado decretó un penalti riguroso que se encargó de transformar Bensebaini. Y así se llegó al final del primer tiempo.
Tras el descanso, llegó el esperado debut con la Real Sociedad de Take Kubo. Como si tratara de hacerle un guiño a su corta edad, Imanol Alguacil lo rodeó de todos los ‘potrillos’ que se llevó al Borussia Park. Jugó junto a Zubiaurre, Arambarri, Jonathan Gómez, Turrientes, Ander Martin, Robert Navarro y Karrikaburu. Pero también jugó con Zubeldia con el brazalete, y Carlos Fernández, que volvió a dar otro paso adelante en su definitivo retorno firmando acciones muy interesantes, con las que fue capaz de habilitar a sus compañeros generando ocasiones de mucho peligro. Así pudieron marcar Karrikaburu, Robert Navarro y hasta Take Kubo. El japonés apenas asomó por esa banda derecha donde dijo en su presentación que más cómodo se encontraba, jugó con libertad de movimiento por toda la zona ancha, y donde más destacó fue por dentro. Se le vio cómodo dentro del estilo de Imanol Alguacil del buen gusto por el balón, filtrando pases entre líneas, asociándose con sus compañeros y llegando a posiciones de remate con asiduidad, tanto que estuvo muy cerca de marcar, en una acción con Carlos Fernández en la que se quedó solo delante del portero, pero le sobró un regate y la faltó colmillo para haber machacado la portería del Borussia Monchengladbach.
Pero en el estreno de Kubo con la Real quien destacó sobre todo fue Jon Karrikaburu. El delantero de Elizondo, igual que hiciera contra el Toulouse, destacó por su movilidad y su capacidad para jugar de espaldas, pero especialmente interesante fue ver su conexión arriba con Carlos Fernández, con el que conectó a la perfección, se buscaron en multitud de ocasiones y se encontraron en la mayoría de ellas. Aunque por lo que se le recordará para siempre en el Borussia Park fue por su golazo. Si por algo mereció ver este amistoso de la Real contra el Borussia Monchengladbach fue por el empate que marcó Karrikaburu, de chilena casi imposible, en una acción pura de killer de área. En una jugada bien hilvanada por los realistas, pero que fue perdiendo fuelle según avanzaba, hasta que llegó al área pequeña un balón bombeado, sin aparente peligro, con el delantero realista de espaldas a la portería. Y entonces jugó con su cuerpo de maravilla, para hacerse el hueco necesario fijando su marcador y ejecutar el gesto de la chilena a la perfección. El balón entró sin remedio en la portería alemana. Soberbio. Servía para que la Real empatara con justicia el amistoso, aunque los alemanes reclamaron otro penalti de Zubeldia, que pudo ser más que el que se pitó en la primera parte, y pudieron ganar al final, pero Zubiaurre sacó una mano fantástica. Aunque también la Real pudo remontar, en una de las buenas acciones que protagonizaron Carlos Fernández y Take Kubo. Al final, el debut del japonés terminó en empate y con Karrikaburu como gran protagonista del partido.