NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

CHINA

Wu Lei, el Balón de Oro desinflado del fútbol en China

Sin cultura ni ritmo de juego, apeados tras Tayikistán en la Copa de Asia, el exjugador del Espanyol avisa: “Nuestro nivel ya no es ni de segunda categoría, se necesitan cambios integrales”.

Wu Lei, el Balón de Oro desinflado del fútbol en China
KARIM SAHIBAFP

A sus 32 años, y 19 meses después de haber abandonado el Espanyol y el fútbol europeo para regresar a su club de origen, el Shanghai Port, Wu Lei continúa siendo el mejor entre los más de 1.400 millones de habitantes de China. Así se lo acredita su conquista de un nuevo Balón de Oro del gigante asiático, el cuarto que gana tras 2018, 2019 y 2022.

Su aportación de 18 goles para que el Port recuperara el título de la Superliga, que sólo había ganado con el atacante antes de que recalara en Cornellà-El Prat, ha sido tan fundamental para la designación como el hecho irrebatible de que el fútbol chino se encuentra en sus horas más bajas, tras el impulso artificial y efímero fomentado hace unos años desde el propio gobierno, que comportó entre otras muchas acciones la adquisición del club perico por parte de un Chen Yansheng cada vez más despreocupado.

“Este premio significa mucho para mí, especialmente en estos momentos difíciles para el fútbol chino. Sabemos que no hemos jugado bien en competiciones internacionales últimamente, pero tenemos que intentar dar lo mejor para ofrecer esperanza a la afición de China en el futuro”, reconocía el propio Wu Lei al recibir el galardón, tal como recoge la agencia de noticias Xinhua.

No en vano, viene el atacante de perder la Supercopa el domingo ante el rival ciudadano, el Shanghái Shenshua (0-1), pero sobre todo de ofrecer con la selección un paupérrimo papel en la reciente Copa de Asia, donde China no superó la primera fase, ni logró un solo triunfo, quedando en la liguilla de grupos por detrás de Qatar –a la postre campeona, de la mano de Tintín Márquez y Luis García– y de la desconocida Tayikistán.

“En la Copa de Asia pudimos percibir que otras selecciones en Asia han progresado al ritmo de lo que se impone en todo el mundo. Si nos quedamos quietos, nuestra distancia con el resto irá aumentando cada vez más. Debemos admitir que en este momento nuestro nivel ya no es ni de segunda categoría en Asia”, sentencia un contundente Wu Lei.

“Cuando gané el primer Balón de Oro, me acababa de ir a España”, recuerda el jugador, quien reflexiona cómo “en ese momento, la atmósfera del fútbol chino iba en aumento. Pero en los dos últimos años no ha sido especialmente bueno”. “Cuanto más difíciles sean los tiempos, más debemos persistir y menos rendirnos. Si los futbolistas no transmitimos esa confianza, el fútbol chino puede empeorar cada vez más”, alerta el jugador, quien observa una doble grieta en su país respecto a lo que vivió en el Espanyol.

Wu Lei, rodeado de seguidores chinos durante su etapa en el Espanyol.
Ampliar
Wu Lei, rodeado de seguidores chinos durante su etapa en el Espanyol.JOAQUIN CORCHERO ARCOSDIARIO AS

“Aprendí mucho en España, no sólo en el terreno de juego, sino que también observé los entrenamientos de la cantera y el sistema operativo del club. Y siento que hay brechas generales entre nosotros y ellos. La comprensión del fútbol y su cultura son completamente distintas”, afirma, por un lado.

Por otro, advierte que al regresar a China notó claramente que la velocidad del juego allí era mucho más lenta: “Se necesitan cambios integrales. Todos nuestros equipos deben ponerse al día del fútbol mundial y trabajar juntos para mantener la Superliga. El ritmo de la liga debe mejorar, no podemos esperar a que las competiciones internacionales se adapten a nosotros”.

En ese sentido, la Superliga ha adoptado nuevas normas en la temporada que arranca este viernes para fomentar la competitividad, como aumentar el número de futbolistas extranjeros permitidos por club, que pasa de cinco a siete. “Si trabajamos juntos y avanzamos por el camino correcto durante cinco o diez años, creo que el nivel del fútbol chino no tardará en mejorar”, trata de alentar un Wu Lei que, con 510 puntos, ha quedado en las votaciones del Balón de Oro por delante de Yu Hanchao (Shanghai Shenhua) y 187 de Wei Shihao (Wuhan Three Towns).

Normas